Una policía murió de un adoquinazo en el pecho

Florencia Pamela González, una oficial de la Policía de la Ciudad, murió este sábado tras un adoquinazo en el pecho que le arrojaron desde un puente en la localidad de Merlo el viernes por la noche, en el oeste del conurbano bonaerense. La joven de 31 años se encontraba peleando por su vida en el Hospital Héroes de Malvinas, pero no pudo recuperarse del impacto pese al esfuerzo médico.

Según constataron fuentes policiales el proyectil tenía un tamaño aproximado de 40 por 15 centímetros y, aparentemente, fue lanzado con la intención de que el vehículo frenara sean asaltados. En el auto, Pamela viajaba con su esposo (también policía) y sus dos hijos ocho y cinco años, luego de prestar servicio en la División Barrio 31-31 Bis.

El hecho se produjo este viernes en la intersección de la autopista Presidente Perón y 20 de junio, en la localidad de Mariano Acosta. Desde el cuerpo policial hicieron las deducciones del piedrazo porque afirmaron que se trata de una modalidad recurrente para robar en esa zona, como en otros puntos del conurbano. 

A través de un comunicado oficial, desde la cuenta de la Policía de la Ciudad lamentaron su pérdida y enviaron fuerzas a sus familiares:

También el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, envió su pésame a través de Twitter: "Abrazo profundamente a la familia de la oficial Florencia González, a su marido Cristian, sus familiares y amigos. Los acompaño en estos momentos de dolor y exijo celeridad para que la justicia actúe y los culpables estén presos".