CRISIS EN LIBRERÍAS
Cuando la economía mata el consumo cultural en Neuquén
La venta de libros bajó un 55% en escala nacional.La crisis en el país golpea sin contemplación a los diversos sectores de la economía. En estos últimos meses uno de los ámbitos más golpeados fue aquel vinculado a los libros que, de acuerdo a la Cámara Argentina del Libro, las ventas bajaron un 30%. Este dato genera una gran preocupación en comerciantes y empresarios del rubro que reconocen que hubo una abrupta suba de precios por el incremento que registró el papel que se ubicó en un 55% y esto se trasladó inmediatamente a las librerías.
Sin embargo, existen otro tipo de razones que llevaron a un recorte en el consumo de libros. Así lo dejó claro un empleado de una conocida librería de Neuquén que, en diálogo con Mejor Informado, afirmó: "La situación del país es muy mala, lo que primero recorta la gente es el consumo cultural. Para que a una actividad de este tipo le vaya bien, la economía del país tiene que mejorar, pero no creo que eso ocurra". Ante esta situación, explicó que, para paliar la situación, apelan a la oferta de libros usados y desarrollan actividades, presentaciones y talleres de literatura que son gratuitos con el objetivo de atraer al público".
A la par de la disminución de ventas de libros, se produjo un crecimiento sostenido de los e-books y de las suscripciones digitales que permite acceder a más de un millón de libros cobrando una suscripción de $8000. Aunque, Matías opinó: "Según mi punto de vista, no competimos, la misma gente que compra e-books compra el libro en papel. Me parece que existe una convergencia entre ambos formatos y no un predominio de uno sobre otro".
Por su parte, otro librero, Santiago, coincidió con la mirada de Matías y expuso que "la gente prioriza la primera necesidad y va dejando de lado los placeres. Antes llevaban cinco libros y ahora llevan uno. Igualmente creo que hay una necesidad de consumo cultural. Cuanto más complicada están las cosas, nacen expresiones bellas desde la resistencia o de un estado de ánimo oprimido, el artista o el director cultural encuentra el camino, en dictaduras salió música preciosa, de resistencia y de protesta. Por ahí el artista o el escritor tiene una necesidad mayor cuando los tiempos son adversos. Habrá una necesidad de mayor expresión cultural pero creo que voy a vender menos libros. Van a surgir nuevos talentos".
Cuando tuvo que hablar de la supuesta competencia entre libros y el tándem e-books y suscripciones digitales, consideró que es una cuestión compleja y que si bien hay una competencia desde el punto de vista económico, en lo cultural no hay tal cosa. "El libro te otorga una experiencia sensorial para leer y está comprobado desde las neurociencias. Si bien la gente se vuelca a los dos formatos, sigo destacando que la experiencia del libro es más rica que la de la pantalla", cerró.