El neuquino que alcanzó la cima de América

Argentina le ganó a Brasil en el Maracaná y tras 28 años, se consagró campeón de la Copa América. Y un neuquino fue protagonista de la hazaña. Se trata del "Huevo" Marcos Acuña, que desde el lateral izquierdo se ganó un lugar en la historia de la Selección.

Durante la Copa, Acuña alternó el puesto con Nicolás Tagliafico. Fue precisamente Tagliafico quien comenzó siendo titular ante Chile, en el debut. Ya para el partido contra Uruguay, Scaloni le dio la titularidad al zapalino. Cuando parecía que se adueñaba de la titularidad, el entrenador volvió a alternar para el partido con Paraguay. Luego, confió en el jugador del Sevilla para los partidos con Bolivia y Ecuador. La titularidad de Tagliafico en la semifinal ante Colombia hizo dudar. Pero finalmente, Scaloni se decidió por el “Huevo” para el partido decisivo, ante Brasil en el Maracaná.

Acuña cumplió con creces. No tuvo problemas para custodiar su lateral y cada vez que pudo, se asoció en ataque. Cuando el técnico decidió el ingreso de Tagliafico por Lo Celso, tuvo que volver a su vieja función de volante y también rindió. Su imagen en el equipo titular de la final, quedará grabada por siempre.

Su historia arrancó el 28 de octubre de 1991, cuando nació en la ciudad del centro de la provincia. Formado en Don Bosco de Zapala, militó en Ferro Carril Oeste hasta el año 2014, cuando llegó al Racing Club de Avellaneda. Tras ser campeón con La Academia , en el invierno del 2017 emigró al Sporting de Lisboa. Tras constantes excelentes rendimientos en el club lusitano, en septiembre del 2020 fue traspasado al Sevilla de España, dónde realizó una excelente temporada 2020-2021.

Tras haber debutado en la Selección el 19 de noviembre de 2016, Acuña acumula 33 partidos con la albiceleste: 17 amistosos, 8 de eliminatorias, 7 de Copa América (ya había estado en la de 2019) y un partido por Copa del Mundo (jugó ante Croacia en Rusia 2018).

Luego de las frustraciones de Rusia 2018 y la Copa América 2019, el Huevo tuvo su momento de gloria en su tercer torneo con la Selección. Cumplió con creces, se dio el gusto de festejar con Lionel Messi, y ya sueña con Qatar 2022.