La eliminación de River luego de caer ante Inter en Seattle terminó con un final escandaloso protagonizado por el neuquino Marcos Acuña intentando irse a las piñas con un jugador rival. Tras el pitazo final, el Huevo fue directo a buscar al neerlandés Denzel Dumfries, con el que tuvo un particular duelo todo el encuentro, y debió ser frenado, entre otros, por Cristian Chivu, el entrenador del Neroazzurro.
El oriundo de Zapala se había cruzado con el neerlandés (viejo rival del histórico duelo entre la Selección Argentina y Países Bajos en Qatar 2022) y justo antes protagonizaron un tumulto importante que terminó con la segunda amarilla y expulsión de Gonzalo Montiel. Después de eso los futbolistas siguieron el intercambio y, apenas el árbitro marcó el final del partido, Dumfries le hizo unos gestos con los brazos y Acuña lo salió a correr.
Ni bien se percataron de la situación, otros jugadores, entre ellos Franco Armani, fueron a frenar al lateral, que también fue calmado por Chivu, director técnico del Inter. Del otro lado, el carrilero neerlandés se marchó al trote directo al vestuario mientras un grupo de hinchas de River llegó a arrojarle palos de banderas.