Luego de la salida de Sebastián Domínguez por los malos resultados que tienen a Vélez en la última posición del Torneo Apertura, la dirigencia se decidió por un candidato de peso como su posible reemplazante: Guillermo Barros Schelotto está cerca de ser nuevo entrenador luego de una larga reunión con Ricardo Álvarez, el director deportivo del Fortín.
La respuesta del Mellizo, es favorable por algunos aspectos: Vélez mantuvo, a grandes rasgos, una base del equipo que viene de consagrarse campeón y además cuenta con futbolistas prometedores en inferiores, lo que sedujo al entrenador para proyectar a mediano plazo. No obstante, Barros Schelotto también impuso algunas condiciones: quiere un contrato alto (el principal inconveniente hoy) y cuatro refuerzos de jerarquía a mitad de año, pensando en que el Fortín juega la Copa Libertadores.
De acordarse la llegada de Barros Schelotto, será la tercera experiencia en el fútbol argentino para él luego de su paso por Lanús y Boca, con títulos en ambos clubes. Su salida del Xeneize se dio en 2018, tras la icónica final de Copa Libertadores en donde cayó ante River en Madrid. Con el Granate ganó la Copa Sudamericana en 2013 y con el club de La Ribera se consagró en ocasiones consecutivas en el torneo local en 2017 y 2018.
El "Plan B" de Vélez
Los otros dos candidatos que siguen en carpeta en caso de que lo del Mellizo no se concrete son Julio César Falcioni, quien ya manifestó que está dispuesto a tomar el mando, y Diego Cocca, con quien también se contactó la dirigencia del Fortín y sería el principal apuntado en caso de caerse lo de Barros Schelotto. El ex entrenador de la selección mexicana viene de un mal paso por el Valladolid español, pero lo anteceden buenos números y tres títulos con Atlas en el país azteca. En Argentina dirigió siete equipos entre la B Nacional y Primera, con su paso por Racing (fue campeón en 2014) como el más destacado.