Por quien doblan las campanas?

Una semana con muchos sobresaltos se vivió en la política local. Y por supuesto que esto no está escindido de la situación nacional. Los sobresaltos parecen ser la constante de la política vernácula desde octubre pasado hasta el final de la administración nacional en 2015.
Neuquén es la nueva estrella del firmamento nacional, el cambio de paradigma energético parece ser el contexto donde la economía argentina se va a refugiar y allí la provincia tiene mucho para beneficiarse. Sin embargo una noticia sobre el tipo de cambio diferenciado encendió todas las alarmas del gobierno provincial.
No son pocos los motivos que tiene el gobierno de Jorge Sapag para alarmarse; la temeraria idea del ministro Kicillof de promover un tipo de cambio diferenciado para el petróleo puso la piel de gallina de todos los operadores de la actividad y obviamente de la epidermis del gobierno neuquino. Había cifradas esperanzas de que la devaluación ayudará al gobierno neuquino a licuar los aumentos salariales otorgados de manera compulsiva tras la crisis policial de fines del 2013.
En medio de tales informaciones el gobierno comenzaba las negociaciones con ATEN para definir la pauta salarial del presente año, en juego está el comienzo de clases para este año. No son nada sencillas las negociaciones y nadie ha dado hasta ahora con la fórmula para cerrar un acuerdo satisfactorio. La complejidad está dada por la escasez de recursos y la desconfianza política existente entre el gobierno y el gremio. Pero no solo la cuestión gremial preocupa al gobierno respecto del tipo de cambio diferenciado. También una decisión de esa naturaleza haría estragos entre los inversores de la actividad.
La complejidad económico-social será el marco en el cual se desarrollará el año y a eso hay que agregarle la situación política de una marcada sensibilidad. La renovación de autoridades partidarias en el partido de gobierno también va a imponer su impronta. 
La elecciones Partidarias
En una reunión partidaria efectuada en Senillosa el senador Guillermo Pereyra anunció su decisión de no competir por la presidencia del MPN. Una decisión que se intuía tras la prolongada ausencia en la actividad partidaria luego de su episodio de salud pasada las elecciones de octubre. 
Pereyra es un actor político de mucha gravitación en la política neuquina y lo seguirá siendo, pero su ascendencia en la CGT de Hugo Moyano y su tarea de senador lo alejan irremediablemente de la escena local. Su vocación de ser gobernador de la provincia es algo que nadie discute, pero conciliar todos los intereses se le hace muy difícil, lo que sumado a las dificultades internas en el gremio, abren un abanico de incertidumbre entre sus seguidores.
No ocurre lo mismo con la senadora Lucila Crexell. Al menos es lo que parecen decir los recientes paredones pintados en la ciudad de Neuquén donde la leyenda "Lucila 2014” parece indicar la pretensión de ser la candidata del sector. Lo anunció Pereyra en Senillosa al sostener que "nuestro sector va a tener su propuesta para el partido”. Desde luego que Pereyra no hizo nombres pero desde la agrupación que apoya a la senadora se pretende ir por la presidencia del partido. No quieren desaprovechar el envión de las elecciones de 2013. Todo está por verse, el saludo de Lucila con su tío Jorge en San Martín de los Andes despertó algunas suspicacias, pero cuando se discute poder en la familia más política de Neuquén no hay parentesco que valga.
La marcha de Pechi  
Por el lado de la oposición solo queda seguir la marcha del intendente de la ciudad de Neuquén, quien puede ser la figura que encabece una coalición opositora que enfrente a la propuesta oficial. Por ahora el cometido de los operadores de Quiroga consiste en acercar posiciones y objetivos con la miríada de políticos que están fuera de la carpa oficial. Y la tarea de exploración marcha bien, pero el cometido más difícil será aunar objetivos y aspiraciones. Algo que en política arruinó más de un proyecto de poder.
La ausencia de Sergio Massa este fin de semana en la ciudad tiene mucho que ver con las llamadas indistintas de Jorge Sapag y de Guillermo Pereyra, ambos a través de sus propios emisarios le han hecho saber su interés en acompañar el proyecto del intendente de Tigre.
Cómo puede ser que figuras tan distintas –supuestamente- desde lo  político-partidario aspiren a referenciarse en una misma figura nacional? Cosas de la política local que no siempre tienen su racionalidad en fundamentos políticos sino en conveniencias electorales. Una disfunción del sistema que los cobija.

M.E.G.