No hubo sorpresas respecto de los pronósticos hechos por los entendidos, no solo en cine sino, particularmente, en los Oscar; y Oppenheimer, dirigida por Christopher Nolan y protagonizada centralmente por Cillian Murphy, ganó el premio a la mejor película, con su historia del "inventor" de la bomba atómica narrada en formato clásico.
El filme se llevó siete estatuillas, pues obtuvo además los premios a mejor director, actor protagónico, actor de reparto, edición, música original y dirección de fotografía.
El otro gran "éxito" de la noche más emblemática de Hollywood fue Emma Stone, quien ganó su segundo Oscar, como mejor actriz protagónica. Lo había ganado también hace siete años, con La La Land.
El director británico Christopher Nolan ganó, en cambio, su primer estatuilla como mejor director. Había sido nominado antes en ocho ocasiones, sin lograrlo.