Roxy Vázquez abrió su corazón para contar que atraviesa por el momento más difícil de su vida. En cuestión de días sufrió dos pérdidas que marcaron su vida, por lo que, lejos de resguardarse, eligió compartir su dolor para tratar de sentirse acompañada en este proceso.
Al iniciar su programa, la periodista se lanzó a blanquear su estado de ánimo: “Quiero arrancar este noticiero, que es mi casa como este canal, en el que hace muchos años estoy trabajando y me gusta compartir. Creo que nos debemos al público que siempre nos mira”.
Por lo que Roxy Vázquez comenzó aclarando que aquellas personas que la notaron un tanto caída tenían razón de sospechar: “Durante todos estos días no estuve viniendo. Me han preguntado muchísimo que me pasaba, muy preocupada la gente y yo lo agradezco. Me gusta y me hace bien ese reconocimiento. Creo que está buenísimo. No soy de las que reniega de la popularidad y de esto que nos da la pantalla”.
“Yo siento que tengo la obligación de contar por qué no estuve. Todos imaginamos que estamos preparados para perder a nuestros padres, porque es la ley de la vida. Creemos que estamos preparados para eso, pero cuando eso llega es muy difícil”, reveló sobre el gran dolor que atraviesa.
Fue así como se lanzó a contar lo que le sucedió y por qué el dolor es tan profundo: “Es muy complicado, sobre todo en el caso de mi papá. No es que tenía una enfermedad o la estaba pasando mal, sino que se fue de un día para el otro. El domingo 8 de junio perdí a mi papá a las 8 de la mañana de manera sorpresiva y una semana después, se murió mi mamá, que estaba atravesando un cáncer con una metástasis muy complicada desde hacía 6 meses”.
“Con mis hermanos estábamos tratando de sobrellevar esa situación de la mejor manera y acompañándola, pero la verdad que no se la deseo a nadie. Es una enfermedad espantosa, es una agonía horrible cuando un cuerpo ya no es el que vos conocés”, expresó sobre lo que más le impactó.
Fue así como se sinceró sobre sus sentimientos: “Por supuesto que estoy destrozada, tengo el corazón roto. Estoy muy triste y angustiada. Tal vez es uno de los peores momentos de mi vida, pero elijo venir a trabajar porque es la mejor manera de homenajearlos”
Y aclaró que, además de realizar el duelo, debe funcionar como sostén de su familia: “Mis hijos están bien. Estamos muy unidos, en familia. Muchas gracias a mis amigas, que son como hermanas que me dio la vida. A ustedes quiero decirles gracias, que acá estoy y que no soy la misma, por supuesto. Voy a duelar, como todos y con los tiempos de cada uno, pero no soy la misma Roxy de la alegría y la joda, como yo soy habitualmente”.