El ejército de Israel recuperó los cadáveres de seis rehenes capturados en el ataque del grupo terrorista Hamás del 7 de octubre, que desencadenó la guerra en Gaza. Mientras mediadores árabes y estadounidenses trataban de avanzar en un acuerdo para frenar los combates y liberar a docenas cautivos que siguen en manos de insurgentes.
Las tropas israelíes recuperaron los cuerpos durante una operación nocturna en el sur de la Franja, explicó el ejército, que no indicó cómo o cuándo fallecieron. Un grupo de familiares dijo que fueron capturados con vida. Hamás sostiene que algunos de los rehenes murieron o resultaron heridos en ataques aéreos israelíes.
El ejército dijo que identificó los restos mortales de Chaim Perry, de 80 años; Yoram Metzger, de 80; Avraham Munder, de 79; Alexander Dancyg, de 76; Nadav Popplewell, de 51, y Yagev Buchshtav, de 35. Metzger, Munder, Popplewell y Buchshtav tenían familiares que fueron secuestrados en el ataque pero quedaron libres durante una tregua de una semana en noviembre.
El deceso de Munder fue confirmado el martes por el kibutz Nir Oz, una comunidad agrícola donde era uno de los cerca de 80 residentes capturados. Murió “tras soportar meses de tortura física y mental”, explicó. Las autoridades israelíes habían determinado previamente que las otras cinco personas habían fallecido.
Por otra parte, un ataque aéreo israelí mató el martes a al menos 10 personas en una escuela reconvertida en refugio en la Ciudad de Gaza, en lo que el ejército calificó como un ataque preciso contra un centro de mando de Hamás. Otro ataque mató a una madre y a sus cinco hijos en el centro del sitiado enclave.
La recuperación de los restos mortales de los rehenes es un revés para Hamás, que espera intercambiar a los cautivos por presos palestinos, la retirada de las tropas israelíes y una tregua duradera. También es probable que esto eleve la presión sobre el gobierno israelí para llegar a un acuerdo que libere a las docenas de rehenes que se cree que siguen vivos.