Por el abuso de un menor, los vecinos del barrio Cuenca XV, quisieron quemar en la noche de ayer, la casa de la familia involucrada a quien habría cometido el hecho. En este contexto, el personal policial debió hacerse presente para proteger la vivienda.
La ira de los vecinos fue desencadenada por el abuso a un menor de 11 años por parte de otro de 14. Por eso, se dirigieron a la vivienda de la familia y hubo enfrentamientos con palos y piedras.
Según comentó una de las familiares del niño, el hecho ocurrió el martes a las 18 cuando se habían juntado a jugar a la play, y los datos brindados fueron confirmados por la Fiscalía de Delitos Juveniles.
Por su parte, la madre del niño que habría abusado, dio aviso de lo que ocurría y lanzó: "Estoy encerrada en el baño por las dudas". "Están a los tiros acá... Estoy sola. La gente con la Policía, y ellos con la gente", decía a través de un audio por celular.