UNA DE MOTOCHORROS
Una vecina gritó fuerte y asustó a los ladrones
Ocurrió cerca de las once de la noche en cercanías de Lago Quillén y Río Desaguadero. Los ladrones tenían amenazada a una adolescente para robarle el celular. Cuando escaparon en moto se cayeron y uno fue detenido.
El solo y potente grito de una vecina obligó a dos delincuentes a desistir del robo de un teléfono celular a una muchacha y escapar a toda velocidad en una moto que, se verificó luego, había sido robada. Encima los dos terminaron desparramados por el piso tras varias cuadras de haber sido perseguidos por un móvil policial. Uno de ellos –menor de edad- fue detenido y en su poder se secuestró una tumbera.
El episodio ocurrió este domingo minutos después de las once de la noche cuando una mujer residente en inmediaciones de Lago Quillén y Río Desaguadero vio el momento en que dos motochorros amenazaban y forcejeaban con una adolescente para quitarle el teléfono. El grito alertó también a otros vecinos y a los padres de la joven que de inmediato llamaron a la Policía.
Al ver frustrado su propósito, los ladrones escaparon a toda velocidad en la motocicleta en la que circulaban. De inmediato llegó la Policía y comenzó la búsqueda de los sospechosos hasta que a la altura del 1550 de la calle Mitre, quien conducía el rodado perdió el control y ambos cayeron desparramados al asfalto. El conductor logró continuar escapando a pie, pero su acompañante, menor de edad, no lo logró. Los uniformados lo esposaron sin problemas mientras permanecía tendido.
En su poder fue encontrada un arma de fabricación casera con un cartucho.
La motocicleta, que no quedó demasiado maltrecha, tenía pedido de secuestro porque había sido robada tiempo atrás.
