JUSTICIA RIO NEGRO
Confirman prisión perpetua al descuartizador de Fernández Oro
El asesino tenía 23 años y la víctima 79. Lo mató a martillazos, lo apuñalo y luego desmembró el cuerpo para poder ocultarlo. Ambos se conocías y el motivo fue el robo del DNI y certificados de plazos fijos.
El Superior Tribunal de Justicia de la provincia de Río Negro (STJ) rechazó un recurso de la defensa, y confirmó la condena a prisión perpetua con la que fue sentenciado Carlos Andrés Carrasco, autor de un homicidio aberrante, cuyas escalofriantes escenas resultan propias de una película de terror.
Carrasco fue encontrado culpable del homicidio de Juan Antonio Martínez Parra, ocurrido entre el 30 de septiembre y el 3 de octubre de 2015, en una casa de Fernández Oro. Por entonces, el asesino tenía 23 años y su víctima 79.
Los investigadores lograron establecer que el asesino le pegó dos martillazos en la cabeza, y que no conforme con ello le asestó varias puñaladas en el tórax y el abdomen, con un cuchillo de grandes dimensiones. La muerte fue el resultado natural de semejante brutalidad homicida.
En medio del baño de sangre, el asesino buscó esconder el cadáver para procurar su impunidad; entonces seccionó las extremidades (supuestamente con un hacha), mutiló el tórax y escondió esos restos cerca de una medianera y en una letrina del lugar. Terrible.
Los investigadores establecieron que Carrasco alquilaba una habitación en el predio del domicilio particular de su víctima, a la que mató y descuartizó para robarle cuatro certificados de plazo fijo y el DNI.
El 5 de junio último, la Cámara Primera en lo Criminal de Cipolletti lo condenó a la pena de prisión perpetua por el delito de homicidio doblemente agravado por alevosía y criminis causa y robo, en concurso real.
Luego, el abogado particular del condenado interpuso un recurso de casación que fue considerado inadmisible. Entonces presentó esta queja que, ahora, ha sido rechazada por los jueces del STJ.
