Una denuncia por una entradera derivó a otra denuncia de robo de vehìculo a mano armada. Todos los caminos, conducìan a gente relacionada entre sí. Y este viernes, se produjo una serie de allanamientos que derivó en la demora de uno de los presuntos autores y otra persona involucrada más.
El primero de los hechos que tomó relevancia para la investigación fue una entradera perpetrada por varios hombres en el oeste ocurrida el pasado 4 de septiembre. Allí, no sólo robaron objetos como televisores, celulares y herramientas; sino que también, violentaron a la propietaria y la ataron con precintos para que no pudiera hacer nada. Todos se fugaron en un auto blanco sin patente.
Una vez comenzada la investigación y tras haber recolectado información por parte de testigos y cámaras de seguridad, pudieron dar con el vehículo. Los ladrones se habían fugado en un Fiat Duna que habían robado horas antes. Tras la entradera, lo dejaron abandonado en jurisdicción de la Comisaría 18°.
Pero eso no es todo. Ya que la investigación siguió avanzando y dieron con cierta relación entre los anteriores robos con uno ocurrido el sábado 2 de septiembre. En aquella ocasión, dos personas con arma blanca sustrajeron un Ford Ka.
Tras unir todas las líneas investigativas, se llevaron a cabo los allanamientos en tres domicilios ubicados en las calles Racedo, República de Italia y Los Zorzales. Las diligencias judiciales fueron por parte de personal de la Comisaría 16° con colaboración de la Oficina de Investigaciones y los departamentos de Sustracción Automotores, UESPO y Seguridad Metropolitana.
Los efectivos secuestraron ropa (utilizadas para cometer los ilícitos), una mochila que contenía precintos y un arma de fuego de fabricación casera tipo tumbera. También, demoraron a dos personas, de las cuales una es un presunto autor de la ola de robos. Tanto lo secuestrado como los detenidos quedaron a disposición de la fiscalía.