Cuando aún está presente el triste final de la turista platense Damiana Guldriz que murió en Bariloche, en El Bolsón se tuvo que organizar un operativo de emergencia para buscar a una pareja de porteños que se perdió en el cerro Piltriquitrón. Luego de varias horas de tarea, los pudieron bajar a la ciudad cerca de las 4 de la mañana con principio de hipotermia por las temperaturas bajo cero y la fala de ropa adecuada.
De acuerdo con la confirmación que brindó la Policía de Río Negro, cerca de las 20 de ayer domingo, se recibió un alerta sobre la desaparición de dos turistas de Buenos Aires, que salieron por la tarde a recorrer la rinconada de Nahuelpan y se perdieron en un sector conocido como El Paredón (cerca de la cima del Piltriquitrón).
De inmediato, se conformó un operativo de búsqueda y rescate integrado por personal policial de la Brigada de Montaña y bomberos. Cerca de las 20:15, el personal llegó al lugar y comenzó con las áreas de búsqueda, en una zona donde hay mucha nieve.
El alerta lo dio una vecina de El Bolsón quien avisó a la Policía la zona donde estaba la pareja. El hallazgo se vio favorecido porque en todo momento los turistas tuvieron señal de celular y pudieron guiar a los rescatistas. De todas maneras, el equipo de búsqueda se dividió en dos grupos para que el trabajo sea más efectivo ante el rápido descenso de la temperatura.
La pareja pudo ser encontrada cerca de las 4 de la mañana y con la ayuda de los rescatistas regresaron a El Bolsón sin consecuencias físicas, aunque con principio de hipotermia. A esa hora, el termómetro marcaba 4 grados bajo cero en la montaña. De acuerdo con la información suministrada, estaban en el sector Huemul, a la izquierda de la cumbre de Piltriquitrón.
Una vez en la ciudad, la pareja agradeció el rescate, se subió a su vehículo particular y se retiró. No aceptaron ser trasladados al hospital local para evaluar su estado físico.
Este hecho avivó la preocupación por el comportamiento de los turistas, que desafían las condiciones meteorológicas, sin ropa adecuada ni conocimientos e ingresan a los distintos senderos de montaña sin percatarse de la peligrosidad que puede tener esa práctica.