Un terrible crimen sacudió a la localidad de Luton, Inglaterra, donde Juliana Falcón, una argentina de 48 años, y dos de sus hijos fueron asesinados por su hijo mayor, Nicholas Prosper, de solo 18 años. La tragedia ocurrió en la madrugada de este viernes, cuando vecinos del complejo Leabank alertaron a las autoridades tras escuchar gritos y disparos provenientes de la vivienda familiar.
Al llegar al lugar, la policía encontró a Juliana, su hijo Kyle, de 16 años, y su hija menor Giselle, de 13, gravemente heridos. A pesar de los esfuerzos por salvarles la vida, los tres fallecieron en el lugar a causa de las heridas.
Nicholas, el autor confeso del triple crimen, fue detenido poco después, a unos 600 metros del edificio, portando el arma utilizada en los asesinatos. Durante la primera audiencia del juicio, el joven confirmó su identidad, mientras su padre, Ray Prosper, devastado por el dolor, le dirigió unas palabras: “Todavía te amo, hijo. Sé que no es tu culpa”.
Juliana Falcón, nacida en Mar del Plata en 1976, emigró a Inglaterra a los 20 años, en busca de mejores oportunidades. En Luton, formó una familia junto a Ray Prosper, con quien tuvo cuatro hijos. En la comunidad era conocida por su solidaridad y compromiso con diversas causas benéficas.
“Tenía una calidad humana increíble, una mujer súper inteligente y era una madre muy dedicada”, recordó su amiga Marina desde Mar del Plata. Juliana, o Julie, como la llamaban en Inglaterra, era reconocida por su generosidad y su devoción hacia sus hijos.