La seguridad en las instituciones educativas de Río Negro está en jaque. A los hechos de la semana pasada en Roca, se sumó un alarmante incidente en Cipolletti. En el Centro de Educación Técnica N° 9, un estudiante menor de 16 años, fue sorprendido con un revólver calibre 22 en su mochila. Inmediatamente las autoridades realizaron la denuncia correspondiente y en cuestión de minutos se montó un operativo policial para evitar cualquier tipo de enfrentamiento.
El hecho ocurrió en el turno tarde, cuando un grupo de alumnos detectó la presencia del arma y alertó a la vicedirectora del establecimiento. La directiva, al confirmar la situación, condujo al adolescente a una oficina privada donde le solicitó que vaciara su mochila. En ese instante, cayó al suelo el arma de pequeño calibre, lo que motivó un llamado inmediato a la policía.
Poco después de las 17:15, efectivos policiales de la Comisaría 32° se hicieron presentes en la escuela y constataron que se trataba de un revólver sin municiones. La rápida intervención evitó que la situación sea más peligrosa, aunque se desconocen las razones por las cuales el adolescente llevó el arma y si estaban organizando algún tipo de enfrentamiento con otro alumno o grupo de jóvenes.
La fiscalía investiga de dónde salió el arma
Ante la gravedad del episodio, el arma fue secuestrada por el Gabinete Criminalística para realizar el informe correspondiente y sobre todo para saber si es apta para disparar. Además se iniciaron actuaciones judiciales enmarcadas en el artículo 289 bis del Código Penal, que regula la tenencia ilegal de armas. Mientras tanto, el adolescente permaneció bajo resguardo en la dirección del colegio hasta la llegada de su madre, quien lo acompañó a la comisaría junto al personal policial.
El Ministerio Público Fiscal abrió una investigación para determinar cómo el menor obtuvo el revólver. Por su edad, no puede ser imputado por tenencia ilegal de armas, lo que plantea interrogantes sobre las fallas del sistema de control y la accesibilidad de estos elementos en la sociedad.
Desde el colegio se informó que se activaron los protocolos de emergencia en coordinación con las autoridades competentes. Sin embargo, el incidente evidencia una preocupante realidad: la violencia escolar requiere nuevas y más peligrosas formas, con estudiantes portando armas en los propios pasillos de la escuela.
Este caso en Cipolletti se suma a lo sucedido la semana pasada en Roca, cuando grupos de estudiantes se desafiaron a través de redes sociales, incluso con videos donde se los veía manipulando armas de fuego. Por este caso, la Policía hizo una serie de allanamientos el pasado lunes en diferentes sectores de la ciudad.