Pese a que en la capital neuquina están prohibidos por ordenanza los prostíbulos, estos existen, camuflados o bien directamente sin habilitación, como el que se allanó este sábado a las 7 de la mañana, en Jujuy 235, plena zona céntrica.
La policía detuvo allí a ocho hombres y siete mujeres: dos argentinas, dos colombianas y tres dominicanas. Los siete hombres fueron sorprendidos en plena tarea, y el octavo, actuando como vigilancia. La dueña o "madama” del lugar no estaba presente en el momento del allanamiento.
Según confirmó Gustavo Orlando, subsecretario de Comercio del municipio capitalino, el allanamiento se hizo tras tareas coordinadas entre la policía y los controles municipales. El local –una casa sin mayores adecuaciones- no estaba habilitado, ni para vender bebidas alcohólicas y mucho menos para que se ejerza la prostitución. Además, estaba "colgado” del servicio de electricidad.
Orlando confirmó que la actividad de control que permite descubrir tales lugares es incesante, y que igual proliferan, abiertos como bares, o simplemente como casas "clandestinas”, al mejor estilo de otras épocas.
La prohibición actual, es evidente, no da muchos resultados: lo que sí es notorio, es que multiplica la clandestinidad de algunas actividades.