Centralismo técnico: tuvimos la luz pero no la pudimos usar

Más allá de los motivos del apagón eléctrico que sufrió el país este domingo, la operación de retorno gradual a la normalidad desnudó una verdad política que duele: la centralización de las decisiones técnicas, postergó a la zona que produce más energía en el país, la que integran Neuquén y Río Negro, y favoreció a los grandes centros poblados de la zona centro de la Argentina.

El apagón fue a las 7, y antes del mediodía Cammesa ya se había devuelto el servicio a Buenos Aires y Conurbano. En Neuquén solo se contaba, a las 19, con 15 por ciento de suministro de energía del Sistema Interconectado, para distribuir. Con eso tuvo que arreglarse CALF, mientras el EPEN buscaba afanosamente la manera técnica de proceder prescindiendo de Cammesa y de las decisiones nacionales.

“Dadas las sucesivas maniobras infructuosas que por parte de Cammesa y Transener se llevaron a cabo para poner en marcha el sistema de 500 kV, sin resultado alguno,  nuestro esfuerzo se concentra en generar "en isla" sobre nuestro sistema de 132 kV. Con estaciones como Planicie banderita, arroyito termoroca, agua del cajón, se trata de estabilizar y sincronizar el sistema”, comunicó el EPEN, pasadas las 18 del oscuro domingo.

El gobernador rionegrino, Alberto Weretilneck, no aguantó el enojo, y lo hizo saber a través de unas redes sociales que funcionaron, también, a media máquina: “en lugar de preocuparse por sus amigos de la empresa distribuidora, las autoridades deberían estar ocupados en que no padezcamos estos apagones”, disparó el mandatario, para después destacar que “Río Negro y Neuquén producimos el 25% de la energía del país ¿seremos los últimos a los que nos devuelvan la electricidad?”.

El “sistema interconectado” no es más que una traducción del centralismo que atenta contra el federalismo, en términos políticos. Traduce técnicamente lo que es el verdadero sistema institucional y político en la Argentina. Es para todo el país, pero se maneja desde el centro. Y eso no está bien, ni siquiera está justificado.

Porque este domingo, la región tenía la electricidad, pero no la pudo usar.

Rubén Boggi