La línea 132 Kv, que dejó sin luz al norte de Neuquén, fue restablecida, tras realizar las reparaciones necesarias que permitieron recuperar la energía, luego de más de 18 horas sin luz.
La buena noticia se vio opacada por un dato preocupante, porque se pudo constatar que la falla se originó por un acto vandálico, como otros que ya se habían efectuado tiempo atrás.
"Se encontraron nuevamente dos cadenas, dos 'boleadoras'-como se conocen en la jerga- que hacen que sigan actuando las protecciones para evitar daños. Esto estaba muy próximo a la estación transformadora Chos Malal, cerca del ejido de la ciudad" dijo, preocupado, el presidente del Ente Provincial de Energía del Neuquén (EPEN) Mario Moya.
Sabotaje confirmado
Mientras tanto, la investigación para terminar de confirmar que el apagón que se vivió fue producto de un sabotaje sigue en marcha. Pero hasta el momento todo indica que se trató de un perjuicio deliberado, que viene repitiéndose.
De hecho se tomaron imágenes que muestran las dos cadenas que fueron arrojadas a la conexión. Una en el paraje La Ciénaga y en los alrededores del Cerro de La Tortuga, a unos 500 metros de la Estación Transformadora.
Este tipo de atentados vienen repitiéndose. Sin ir más lejos, esto mismo hallazgo se registró recientemente, en tres oportunidades. La afectada siempre fue la línea que une Chos Malal con el Departamento Minas.
Cabe destacar que estos hechos no sólo generan las quejas de los usuarios, sino también importantes pérdidas económicas. Quien está a cargo de la investigación es el fiscal Fernando Fuentes, que adelantó que los informes de peritos policiales serán claves para esclarecer lo ocurrido.
Las imágenes, sin embargo, son más que contundentes. Y reafirman que detrás de la salida del servicio hubo un acto deliberado, que buscó provocar la falla.