Los Pumas cerraron una auspiciosa gira por Europa

Los Pumas cerraron una convincente gira por Europa en la tradicional ventana internacional de julio. Con saldo de una ajustada victoria frente a Rumania y un empate y triunfo en la jornada de este sábado ante Gales en lo que fue el cierre del tour. Hoy en el segundo test ante los galeses en Cardiff, volvieron a mostrar credenciales y se quedaron con el partido por 33-11.

Los 22 puntos fueron la mayor diferencia en un triunfo argentino ante Gales en una historial, la anterior habían sido los 18 del 45-27 el 17 de junio del 2006 en Vélez. A gales no se le ganaba hace nueve años, el 10 de noviembre del 2012, en Cardiff, por 26-12, ese fue el último resultado favorable para nuestra selección. Esta gira precede a lo más duro del año que deberán afrontar Los Pumas, ya que el próximo 14 de agosto disputará el Rugby Championship contra Sudáfrica, All Blacks y Australia.

Lo mejor de Los Pumas en toda esta excursión de julio se vio en los primeros 40 minutos de hoy, se mejoró en la disciplina (solo cuatro penales contra los nueve de hace siete días. Naturalmente, eso genera mayor posesión si es que la obtención es buena, lo cual ocurrió por el lado del line aunque no del scrum (dos penales, uno de Gómez Kodela y otro de Tetaz Chaparro).

El ataque de nuestra selección mostró dinamismo y profundidad y fue la forma para encontrar los tries de Moroni y Cubelli. En cuanto a individualidades, muy sólido lo de Bruni.

En el debe, se repitió la mala elección o ejecución de las salidas en campo propio. De hecho, luego de un rechazo y floja cobertura defensiva llegó el primer try del partido, de Lane. Gales empezaba a mostrar su mayor vocación de jugar abierto, pero la defensa argentina anduvo bien como para frenar algunos movimientos. En resumen, y sumado a un penal y un gol de Sánchez (erró el primero y un drop), se llegó a un convincente 17-8 al descanso.

En el arranque del ST el equipo perdió esa consistencia y regularidad que había mostrado los 40' anteriores. Ya el dominio era repartido y aparecían los errores (pelotas perdidas, desconcentraciones) que llegan cuando el seleccionado entra en lagunas. Un penal de Evans encendió la alarma (11-17 a los 50'), pero la amarilla a Amos (carga en el aire a Carreras) resultó clave para que el local debiera jugar con uno menos durante 10'.

 Un par de penales de Sánchez, la mejoría en el scrum y la defensa mantenían el partido con diferencia más allá de que Gales -también muy impreciso- atacaba pasándose la pelota.

Así se fueron consumiendo los minutos hasta que la victoria -tercera de visitante contra siete éxitos del local- se decantó con -además- un último try de Matera para dejar una imagen de gira mejor que como había comenzado. Necesario e ideal para afrontar lo que viene contra las potencias del Sur.