Tigre dio el golpe en el Monumental y se metió en semi

Tigre sorprendió en el Monumental a River y lo venció por 2 a 1, con  goles de dos ex Boca Juniors: Mateo Retegui y Facundo Colidio. Con el triunfo, el Matador jugará ante Argentinos Junior la semifinal de la Copa de la Superliga Argentina. 

De entrada Tigre, fue guapo y sostuvo su estilo aún ante River y en su casa. Apostó a presionar arriba y, con el balón, intentó salir de abajo, con prolijidad, pero no temió saltar líneas para Retegui y Colidio si veía complicado el panorama. De hecho, tuvo las dos primeras chances del encuentro y una terminó en gol. A los 2 minutos, el ex Boca remató desde afuera del área y Armani respondió enviando al córner. A los 4', Zabala sacó el centro desde la izquierda y el Chapita se arqueó y acomodó el cuerpo para inventar un cabezazo letal, que terminó en el 1-0.

Si bien el dueño de casa reaccionó con un par de aproximaciones interesantes (un remate de Enzo Fernández que pasó junto al palo derecho del arquero y una arremetida de Casco que anticipó Marinelli), continuó incómodo, por momentos cediendo el control del pleito y sin hacer pie en el mediocampo.

La posesión del balón por parte del local se tornó infructuosa ante el buen posicionamiento de Tigre y su plena concentración para cortar y salir rápido para lastimar. El foco de la visita estuvo en nublar la imaginación de Enzo Pérez y Enzo Fernández, las dos piezas en las que se apoya mayoritariamente el juego de los orientados por Gallardo.

A los 20' el Millonario encontró espacios, De la Cruz habilitó de cabeza y Pochettino, mano a mano, resolvió cruzado y desviado. Pero seguido,  el Matador también pudo ampliar, por ejemplo, con el intento de 50 metros de Colidio que tapó Armani, o el cabezazo de Prediger, que ganó en las alturas, pero le salió muy al medio.

Los de Victoria ofrecieron varios puntos altos: los centrales Cabrera y Luciatti, Blondel, Zabala, Castro y los delanteros, pero sobre todo el equipo como bloque, siguiendo al pie de la letra el plan, que finalizado el primer tiempo salió a la perfección.

En el complemento, River fue otro de entrada. A los 4´Julián Álvarez controló el balón y ensayó una volea desde afuera del área, pero el arquero de Tigre contuvo sin inconvenientes. Fue un anticipo de lo que iba a suceder minutos después.

Sobre los 12´Enzo Fernández recibió en soledad en la puerta del área e impactó un derechazo preciso que se coló en el ángulo de Gonzalo Marinelli. El gol fue como un energizante para el conjunto de Gallardo que asfixió a Tigre pero sin lograr torcer el marcador.

Pero el Matador zafó del asedió y respondió con el segundo. Llegando a los 21´, Facundo Colidio aprovechó un error de Paulo Díaz en la entrega, enfrentó a Armani con mucha tranquilidad y facturó.

El gol transformó partido, Gallardo envió a Brian Romero al campo y se paró con su última línea en campo de Tigre. Desorientado por la desventaja, el local fue más ganas que ideas. Y en ese golpe por golpe, el Millonario dejó espacios para la contra.

Con mucho amor propio, el local siguió intentando pero chocó con la seguridad de la última línea del Matador, que supo abroquelarse y sobrellevar el vendaval de aproximaciones del conjunto local.

Sobre los 39´una jugada polémica se adueñó de la instancia final del encuentro. Palavecino controló dentro del área, Marinelli salió apurado y el volante voló por los aires. El árbitro Espinoza a instancias del VAR no convalidó el penal .

Esa última jugada sentenció el partido, porque River ya no tuvo resto y Tigre jugó la heroica. El triunfo del Matador fue justo y merecido. Dejó afuera al Millonario en su estadio y se metió en la semifinal de la Superliga Argentina.