TORNEO DE LEYENDAS
Sabatini y Dulko perdieron la final de Roland Garros
Las ex tenistas argentinas cayeron en la definición frente a la dupla italiana Pennetta y Schiavone, que se coronaron en París.Gabriela Sabatini y Gisela Dulko no pudieron quedarse con el Torneo de Leyendas femenino de Roland Garros. Las argentinas avanzaron primeras en su grupo pero perdieron en la definición frente a las italianas Flavia Pennetta (ex pareja de Dulko en el circuito profesional; juntas fueron N° 1 del mundo) y Francesca Schiavone en la cancha Suzanne Lenglen.
Las históricas tenistas argentinas ganaron el primer set por 6 a 1, pero las italianas se recuperaron y triunfaron 7-6 (4) y 10-6 en el match tie break. Más allá de la derrota, fue un gran regreso de ambas, que además de la competencia resaltaron la importancia de volver a encontrarse con grandes leyendas del tenis femenino y disfrutar del juego nuevamente.
La actuación de Sabatini y Dulko en el primer set fue contundente y triunfaron cómodamente, pero el partido logró una mayor paridad en el segundo parcial, más allá de que las argentinas tuvieron dos puntos para ganar el campeonato pero no pudieron cerrarlo. La final se definió con un match tie break al mejor de 10 y ahí sus rivales hicieron la diferencia en los últimos puntos para quedarse con el partido y con el torneo.
“Fue increíble esto. Compartir esto con Gise fue muy especial. Se armó un gran grupo fuera de la cancha”, dijo una Sabatini emocionada tras la derrota en la final. “La pasamos muy bien estos días”, agregó Dulko.
“Jugar con Flavia y Francesca fue muy especial. Tener enfrente a dos jugadoras que siempre admiré ya fue un trofeo. Cada punto fue genial, muy lindo”, cerró Gaby tras vivir una experiencia única en su regreso al tenis en Roland Garros. “Cada momento fue de felicidad”, sumó antes de la despedida.
En la antesala de la final, Sabatini, Dulko y el resto de las leyendas participaron de una cena en honor a los históricos. En esa reunión, Gaby deleitó a todos los presentes cuando se sumó a cantar una canción de los Rolling Stones que tocó la banda del recordado tenista John McEnroe.
Antes de perder la final, las argentinas lograron dos victorias y una derrota en la fase de grupos, mostrando un gran nivel de tenis que les permitió llegar a la definición del certamen.