Con Benedetto de racha, Boca gritó "campeón"

Con un Darío Benedetto intratable, Boca se quedó con la Supercopa Argentina tras golear por 3-0 a Patronato en el Estadio Único Madre de Ciudades de Santiago del Estero y así levantar su primer título en este 2023.

Desde el arranque Boca mostró credenciales en el partido e intento dejar claro que iba a ser valer la diferencia de categoría. Fue así que a los 6 minutos, a través de una pelota parada ejecutada por Sebastián Villa, encontró la cabeza de Advíncula que no logró darle ni fuerza ni dirección al balón.  

Por su lado Patronato, apeló a complicarle el cotejo a su rival, cortando y ensuciando las salidas claras de Oscar Romero, quien siempre debió lidiar con dos marcadores cada vez que intento ponerse vertical al arco.    

Promediando los 15’ lo tuvo el Xeneize por duplicado de la mano de  Darío Benedetto, en la primera se desprendió en el área del conjunto de Paraná y cabeceó una pelota que se fue cerca del ángulo superior derecho de Julio César Salvá. Pegado, también por la vía aérea, el delantero no resolvió cómodo y la pelota se fue al saque de meta.

A esa altura Boca ya era más que Patronato y sobre los 19’ Villa lo hizo saber. El colombiano apeló a su velocidad para capitalizar la asistencia de Langoni, quien se sacó con claridad a su marcador pero no supo definir ante la salida presurosa del arquero Salvá.

El partido ganó en vértigo y promediando la etapa el que lo tuvo fue Luca Langoni, que desarticuló con su rapidez a la última línea del Patrón, pero una vez más el Xeneize chocó con los notables reflejos del arquero de Paraná.

A los 34’ se dio la primera polémica de la noche, tras un centro de Langoni, Matías Ruiz Díaz tocó la pelota con la mano dentro del área y Merlos en primera instancia no dudó, pero el VAR se encargó de anular la jugada después de observar la posición adelantada de Benedetto.

Con el equipo de Hugo Ibarra siendo más que su rival, llegó el gol de Boca pisando los 42’. Una notable proyección de Figal en ofensiva le permitió a Darío Benedetto fusilar a Julio César Salvá. El Pipa estampó el 1 a 0 con autoridad, resultado con el que se despidió la etapa.

En el complemento Patronato intento desde el inicio adelantarse en el campo y jugar el partido en campo de Boca. Pero ese adelantamiento de  líneas y lentitud en el retroceso hizo que el equipo de Ibarra sacara rápidamente dividendos.

Primero con un gran contragolpe que terminó con Sebastián Villa rematando al arco en velocidad, anticipando lo que vendría. Ya que a los 7’ Benedetto aprovechó una mala salida del arquero Julio César Salvá y de cabeza puso el 2 a 0.  

Si bien habían pasado solo unos minutos del inicio de la segunda etapa, el Xeneize ya había dado el golpe definitivo en la cálida noche de Santiago del Estero. Que termino de consumarse cuando a los 16', nuevamente Benedetto convirtió su tercer gol, tras una gran asistencia de Frank Fabra.

Promediando el complemento, Boca tenía el dominio absoluto del partido y cada contragolpe eran puñales para Patronato, que salvo algún remate de media distancia, nunca le encontró la vuelta al juego.

Con el partido definido, Ibarra aprovechó para darle rodaje a Briasco y Ramírez y sentó en el banco a Benedetto que se retiró con un dolor en su pierna derecha. El resultado ya era irreversible y Patronato lo sufría en demasía.

Los minutos finales le permitieron al Campeón de la Supercopa, florearse ante un público que alentó hasta el final del encuentro y festejó de sobremanera la obtención de su título número 52 en el fútbol argentino