A lo largo de este miércoles, el país descubrió en el Maligno Torres, ganador de la medalla de oro en BMX Freestyle todo un personaje. La hoy periodista Mercedes Margalot entrevistó al argentino que esta mañana pegó primero y dejó sin respuestas a los principales candidatos, el británico Kieran Reilly y el francés Anthony Jeanjean (último campeón del mundo en la categoría).
Allí, el nacido en Santa Cruz de la Sierra y criado en Córdoba, que fue recibido con festejos en la villa olímpica por el resto de los atletas nacionales, no se mostró para nada estresado con la recorrida: "Yo estoy muy bien, es un placer conversar con vos es súper divertido", le dijo a Mechi en el comienzo, que de medallas algo sabe (con Las Leonas ganó 1 medalla de plata y 2 de bronce).
A partir de ahí, el Maligno Torres reveló su estrategia para ganar la medalla de oro. Sobre el criterio de los jueces, el biker contó que analizó podría obtener un peso extra en el puntaje al combinar trucos saltando de una rampa a otra: "Valoraron lo que busqué yo, desplazarme de una rampa a la otra, inventar otro truco en la transferencia y por eso lo valoraron y me sentí contento que lo hayan valorado", dijo.
Otro factor que le jugó a favor, es que empezó antes que el resto de los candidatos, y confesó que tras su impresionante ronda de 94.82 "les metimos presión a todos los demás y se les empezó a complicar". Sobre el francés Jeanjean, recordó para quienes no siguen el BMX Freestyle que es el último campeón del mundo y "era muy difícil ganar estando en Francia, pero pude empezar metiendo un puntaje donde les pude meter yo presión, porque siempre me la ponen a mí", dijo entre risas acerca de cómo solían ser las competiciones previas.
Así fue la ronda de 94.82 del Maligno Torres en París
También indicó que el factor público puede incidir en la decisión de los jueces: "Es real que suma interactuar con la gente, que la gente esté eufórica gritar y puede llegar a sumar". Sobre su gesto de camaradería ante la pasada del británico Reilly, dijo: "Lo aplaudí porque no me interesa que se caigan, quiero que hagan lo que quieran, que les salga y ganarles porque sino no me sentiría conforme. Lo aplaudí porque son todos buenísimos, son todos guerreros", remarcó.
Todos estos factores, además de su impresionante performance, conspiraron a favor para dar el golpe en París y traer la primera medalla de oro a Argentina desde Río 2016.
Sobre el final, el móvil cruzó al Maligno Torres con sus padres con quien tuvo un emotivo diálogo en el que les agradeció por su apoyo y por contención. En un momento, la madre le preguntó cuándo vuelve y el joven le dijo que iban a volver el jueves, pero ante la victoria cambiaron los pasajes: "No me esperen", dijo entre risas.