La Liga Nacional de Básquet entra en su capítulo más electrizante. Esta noche, desde las 22:10, Instituto recibirá a Boca Juniors en el estadio Ángel Sandrín de Córdoba, con la obligación de ganar para estirar la serie a un séptimo y definitivo partido. El Xeneize, en cambio, llega con la ventaja 3-2 y la posibilidad concreta de coronarse campeón por segundo año consecutivo.
El quinto juego, disputado el pasado sábado en La Bombonerita, fue un verdadero partidazo. Boca se impuso por un ajustado 85-84 en un duelo de altísima intensidad, que se resolvió en la última jugada gracias a la sangre fría del colombiano Andrés Ibargüen, quien anotó el libre decisivo tras una falta de Lugarini. Ibargüen fue la figura con 21 puntos y 9 rebotes, acompañado por Schattmann, Vildoza, Traylor y Mata, que fueron claves en distintos pasajes del juego.
Instituto, que comenzó mejor con un parcial de 16-3, pagó caro su bajón en el segundo cuarto. Aun así, peleó hasta el final con actuaciones destacadas de Negrete (23 pts), Saiz (19) y Copello (15), quien tuvo una gran noche desde el perímetro. El antecedente inmediato, sin embargo, reaviva fantasmas: en 2023, Boca también le ganó la final a la Gloria por 4-2.
Las estadísticas juegan a favor del conjunto azul y oro. Desde que las finales se disputan al mejor de siete, el equipo que ganó el quinto punto terminó quedándose con el título en la mayoría de los casos. Pero en Córdoba no pierden la fe y van por el golpe que les permita definir todo el próximo domingo en La Bombonerita.
La gran duda de Instituto para esta noche es el uruguayo Nicola Pomoli, una de sus piezas clave, que arrastra una lesión abdominal. “No debiera jugar, no quiero que se lastime más de lo que está. Vamos a hablar con él, pero no es fácil”, explicó su entrenador Lucas Victoriano.
Además, habrá presencia arbitral mendocina: Ariel Rosas, quien ya dirigió el primer juego de la serie, fue designado junto a Pablo Estévez y Fernando Sampietro para impartir justicia en este sexto round.
Todo listo para una nueva noche apasionante. Boca quiere cerrar la historia y gritar campeón en Córdoba. Instituto, empujado por su gente, se juega la última ficha para seguir soñando.