Miles de fanáticos de La Renga se congregaron en las inmediaciones de Parque Patricios desde temprano para calentar la previa colgando banderas en las esquinas del barrio. A las 21, las luces se apagaron y sonaron los primeros acordes de “Buena ruta hermano”, uno de los temas que escribieron para la banda sonora de Totalmente Poseídos, la road movie que estrenaron el año pasado sobre su vuelta a los escenarios tras la pandemia de Covid-19.
En el período que transcurrió entre este recital y su presentación de 2017, también en el estadio Ducó, salieron canciones nuevas, entre ellas el recientemente estrenado single “Hay un tirano que es para vos” -que también fue parte del setlist- y un álbum, Alejado de la Red, de 2022, el primero que lanzaron en ocho años.
Sin embargo, la previa del esperado recital de La Renga en el estadio de Huracán, este fin de semana, se vio empañada por incidentes en los accesos, cuando grupos de fanáticos intentaron ingresar sin entradas. La situación derivó en enfrentamientos con el personal de seguridad y efectivos de la Policía Federal, que intervinieron rápidamente, aunque no lograron contener los desmanes iniciales.
Debido a la escalada de tensión, se utilizó un camión hidrante para dispersar a la multitud, especialmente sobre los ingresos laterales de la avenida Caseros, donde se concentraron los disturbios. Como consecuencia del operativo, un agente policial resultó herido en una mano y fue asistido por los servicios de emergencia.
Además, fueron detenidas 17 personas que ejercían como “trapitos” en la zona. Según fuentes policiales, dos de ellos tenían antecedentes por la misma actividad.
A raíz de estos incidentes, el recital comenzó con algunos minutos de retraso, mientras se despejaban los accesos y se reestablecía el orden.
Un megaoperativo para garantizar la seguridad
Para concretar su regreso a los escenarios porteños, La Renga debió cumplir con un riguroso protocolo de seguridad, exigido por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que incluyó:
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692 efectivos policiales por servicio complementario y otros 350 en operativos ordinarios, con refuerzos desde las 7 de la mañana y pico de actividad entre las 13 y las 2 de la madrugada.
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314 vigiladores privados por día, encargados de realizar cacheos, establecer anillos de seguridad y controlar mochilas.
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10 ambulancias, 18 médicos y hasta 120 socorristas de la Cruz Roja, distribuidos en cuatro puestos de hidratación.
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145 agentes de tránsito, con 18 cortes viales y carriles especiales liberados para facilitar el acceso al Hospital Muñiz.
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Dotación de bomberos voluntarios con 14 miembros y un camión autobomba de prevención.
Se repetirán los controles
Desde el Ejecutivo porteño informaron que el mismo operativo de seguridad y asistencia se mantendrá para los conciertos del 1 y 5 de julio, que también se realizarán en Huracán. El objetivo es evitar nuevos incidentes, proteger al público y garantizar la tranquilidad de los vecinos de Parque Patricios.
La Renga, que vuelve a presentarse en la Ciudad luego de varios años, se encuentra en plena gira con localidades agotadas y un fuerte dispositivo de control como condición para su regreso a los escenarios porteños.