Karina “La Princesita” atraviesa uno de los mejores momentos de su carrera. Se la ve radiante como conductora de Algo de música en Luzu TV y participando como jurado en “El regreso” de La Voz Argentina, el ciclo que ofrece una segunda oportunidad a participantes eliminados. Sin embargo, detrás de su presente brillante hubo etapas difíciles, marcadas por problemas de salud física y emocional que dejaron huella.
En 2022, la cantante vivió una situación que alarmó a sus seguidores. Mientras se encontraba en Entre Ríos para dar un show, comenzó a experimentar dificultades respiratorias. Fue allí donde recibió el diagnóstico de asma, una condición que la obligó a atenderse de inmediato con su médico de confianza. Aun así, decidió continuar con la presentación para no decepcionar a su público.
En redes sociales, Karina “La Princesita” aclaró que estaba “controlada” y pidió a los fans que la acompañaran en esa noche especial. El mensaje tranquilizó a muchos, pero también encendió el debate sobre la importancia de priorizar la salud por sobre las exigencias laborales, especialmente en la industria musical, donde las agendas suelen ser intensas y desgastantes.
Ese mismo año, la artista reveló en televisión que había atravesado un episodio mucho más delicado: una internación por depresión. Las críticas constantes hacia su aspecto físico en redes sociales se convirtieron en un peso difícil de soportar y terminaron afectando su bienestar emocional. “Me tuvieron que internar, estaba muy triste, con psiquiatra, porque no podía más”, confesó.
Además de la presión mediática, Karina “La Princesita” se encontraba transitando un momento personal muy intenso: su hija Sol cumplía 15 años y los preparativos de la fiesta, junto con el desafío de dejarla volar por su cuenta, la impactaron emocionalmente. Madre e hija han compartido una vida muy unidas, lo que hizo que esta transición fuese aún más sensible.
La intérprete también contó que desde pequeña enfrentó situaciones traumáticas, incluyendo episodios de violencia de género, y que muchas de sus emociones actuales están ligadas a esas vivencias. Con el tiempo, comprendió que no se trataba solo de hechos aislados, sino de heridas profundas que requerían atención y cuidado.
Con valentía, Karina “La Princesita” se convirtió en una de las voces públicas que más han hablado sobre salud mental en el mundo de la música. Advirtió que las giras, la exposición y la falta de descanso terminan afectando a cualquier artista, y ella misma lo padeció.
Hoy, la artista disfruta de un presente renovado, enfocado en su crecimiento profesional y personal. Las internaciones, el asma y la depresión forman parte de su pasado, pero su experiencia la transformó en una figura más fuerte y consciente de la importancia de cuidarse.
