El plan de la OTAN para detener la expansión rusa en el Ártico

Además de los intereses geoestratégicos en el sur de Ucrania y Europa Occidental, Rusia va por más y quiere expandirse al Ártico. Dicha pretensión trajo consigo una respuesta inmediata por parte de la OTAN. En ese caso, el secretario general de dicha organización militar, Jens Stoltenberg, afirmó que existe presencia rusa en el Ártico y eso representa un desafío y advirtió de que se trata de una zona vital para los intereses económicos y de seguridad de Moscú.

Desde el Kremlin confirmaron que el Ártico forma parte de la estrategia de Moscú y que el vínculo que mantiene con China tiene como finalidad primordial un mayor desarrollo y no puede representar una amenaza para ninguna otra nación. Al mismo tiempo, el portavoz del gobierno presidido por Vladimir Putin, Dimitri Peskov, consideró las declaraciones de Stoltenberg como confrontativas, si se tiene en cuenta las intenciones de la OTAN en sancionar a Rusia.

Por otro lado, el representante máximo de la OTAN, Jens Stoltenberg, cuestionó la decisión de Moscú de reabrir cientos de nuevas y antiguas bases militares de la época soviética que serían utilizadas como banco de pruebas para muchos de esos sistemas de armas.

El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, también se hizo eco sobre estos movimientos ajedrecísticos por parte de Rusia y la posterior respuesta de la OTAN. Sobre esto, el premier del Partido Liberal de Canadá subrayó: "Rusia es una creciente preocupación para todos nosotros. Lo que hace adecuado compartir con el secretario general (de la OTAN) todo lo que Canadá está haciendo a través de Norad y de forma independiente para asegurar que estamos protegiendo esta región”.