Estados Unidos endurece el control en la frontera con el fin del Título 42

Finalizó la vigencia del Título 42 en Estados Unidos. Se trata de la norma que permitía a las autoridades expulsar de forma expedita a los extranjeros que llegaban a las fronteras. Esta medida había sido puesta en marcha en 2020 como salvaguarda ante la pandemia de coronavirus, pero sirvió también para controlar la entrada de migrantes al país.

En la práctica, el Título 42 derivó en más de 2,8 millones de expulsiones. Ahora que finalizó, el  gobierno estadounidense teme la posibilidad de que derive en una llegada masiva de extranjeros y que se produzca una crisis en la frontera sur. De hecho, estiman que en el norte de México hay más de 150.000 migrantes esperando en albergues y campamentos para cruzar la frontera.

Ahora se calcula que se presentarán hasta 13.000 migrantes diarios, el doble de llegadas que solían registrarse. Para intentar evitar que la situación se escape de control, el presidente Biden anunció una nueva serie de medidas. Quieren “mejorar la seguridad de la frontera, limitar la inmigración irregular y crear procesos adicionales seguros y ordenados”.

Estas decisiones implicarán mayor control sobre los migrantes que llegan a las fronteras e incluyen la expulsión y sanción de quienes entren de forma irregular en días, el procesamiento expedito y bajo detención, aumentos en los vuelos de deportación, la apertura de centros de procesamiento en otros países y la obligación de concertar citas con los puestos fronterizos .

En paralelo, ciudades como Laredo y El Paso están en emergencia. Y el gobernador de Texas, Greg Abbott, desplegará una unidad táctica fronteriza de la Guardia Nacional para “interceptar y repeler a grandes grupos de migrantes” que intenten entrar ilegalmente. Además, el gobierno federal envió 1.500 soldados de apoyo a la patrulla fronteriza, aunque sin funciones policiales.