El presidente argentino expresó durante una entrevista realizada por un diario de Córdoba, que se siente "acompañado por la sociedad y la dirigencia" política en el marco de "la situación de emergencia" en la que puso al país la pandemia de coronavirus y valoró el "esfuerzo" que se hace para mantener el "nivel de acatamiento de la cuarentena, que es muy alto", pero pidió no "relajarse" porque "el problema está muy lejos de terminarse".
El jefe de Estado advirtió que "cuando uno dice que pareciera que va yendo bien" la batalla que se le está dando a la pandemia para mitigar su propagación, no quiere decir que la gente "se relaje y sienta que el problema está terminado".
Fernández también dejó en claro que "el problema está muy lejos de terminarse", y pidió que "salgan a la calle aquellos que están habilitados para hacerlo" y que se mantenga adentro de sus casas el resto, "fundamentalmente los adultos mayores", teniendo en cuenta que "el 85% de los afectados son mayores de 65 años".
También se refirió a los testeos que se realizan para detectar los casos de coronavirus, y en ese sentido dijo que "Argentina está en el promedio de tests que el mundo hace", y precisó que "se hacen 35 veces más tests que los que se hacían al comienzo" de la pandemia, a lo que agregó que "la multiplicación de tests ha sido enorme".
El Presidente opinó que el hecho de que crezca la cantidad de tests que se realizan "y no tanto la cantidad de enfermos, tiene que ver con la cuarentena", señalando que se está por cumplir un mes desde que se declaró el aislamiento social, preventivo y obligatorio.
El mandatario también citó el caso del geriátrico de la localidad cordobesa de Saldán, donde se infectaron más de 45 personas, para dimensionar la velocidad de los contagios.
Y agregó que "ese fenómeno deja ver perfectamente la velocidad de contagio que existe, y por eso a todos les pido que no se relajen".
Por otra parte, Fernández manifestó que "Los resultados que Argentina está logrando son ponderables, esto es mérito de todos los argentinos, de todos los que entendieron el sentido de la cuarentena".
El presidente también fue consultado respecto a la posibilidad de hacer excepciones en las condiciones de cuarentena, a lo que respondió: "Argentina es un país muy extenso geográficamente y con realidades muy distintas, no es lo mismo la situación de algunas ciudades con la realidad de otras regiones menos pobladas, hay condiciones en las grandes ciudades que favorecen la transmisión del virus y lugares rurales donde el riesgo aminora mucho".
Al respecto, dijo que por eso "pedimos a los gobernadores que ellos nos digan a dónde se puede liberar la cuarentena, lo que hay que ver es el riesgo que realmente existe en cada lugar", sostuvo.
Respecto al clima social que se vive en el país que, Alberto Fernández señaló que “no" observa "mucha tensión" y valoró el acompañamiento gremial.
Aprovecho para comentar también que "los sindicatos están acompañando con enorme responsabilidad, sería muy ingrato si no dijera que he recibido el apoyo de todos los dirigentes gremiales", sostuvo el mandatario en la entrevista.
Y en el mismo sentido, manifestó la percepción de acompañamiento que se extiende a otras áreas: "También veo que, en los sectores más humildes, los movimientos sociales están haciendo un gran trabajo de contención. Por supuesto, valoro el trabajo de los intendentes y de los gobernadores", dijo.
El presidente hizo un breve análisis sobre la situación, señalando que "el coronavirus nos puso a prueba como sociedad y la estamos aprobando. Todos la estamos pasando mal; algunos más que otros, pero nadie la está pasando bien. Sin embargo, todos somos disciplinados".
Finalmente, Fernández se refirió también al acompañamiento de la dirigencia política, sobre la cual dijo que "se siente muy acompañado", aun sabiendo que llegará el momento en que no van a estar de acuerdo "porque así es la democracia", y dijo: "En lo verdaderamente importante estamos todos muy consustanciados, todos tirando para el mismo lado".