"Ni Una Menos. 10 años de salidas colectivas. Unir las luchas es la tarea”, señala el flyer difundido por el Colectivo Ni Una menos. Por primera vez desde que se realiza esta movilización, cuyo objetivo es visibilizar el drama que enfrentan las mujeres por la violencia de género y los femicidios, se decidió modificar la fecha para acompañar el reclamo de los jubilados.
Por este motivo, en lugar de convocar para este martes 3 de junio, se está haciendo para el miércoles 4 a las 16.00 frente al Congreso para protestar "contra el ajuste y la crueldad”. Desde la organización también llaman a participar a partir de "las 18 a la gran asamblea con todos los sectores en CTA Autónoma (Bartolomé Mitre 748) para pensar juntxs la jornada del 4J".
10 años del primer grito colectivo contra la violencia de género y el femicidio
El 3 de junio de 2015, una multitud tomó las calles de todo el país bajo una consigna clara y urgente: Ni Una Menos, en reacción al femicidio de Chiara Páez, una adolescente de 14 años asesinada por su novio en Santa Fe. Esta reacción se transformó en un movimiento colectivo que marcó un antes y un después en la historia del feminismo argentino.
La convocatoria fue impulsada por un grupo de activistas, periodistas, escritoras, artistas y estudiantes, entre otros movimientos, que canalizó el hartazgo frente a la violencia machista. La consigna, tomada del poema de la mexicana Susana Chávez, asesinada en 2011, se volvió símbolo de una lucha que traspasó fronteras y se replicó en toda América Latina.
Año tras año, el Ni Una Menos se consolidó como una plataforma de denuncia, memoria y acción. Cada 3 de junio se renueva el reclamo por justicia, por políticas públicas efectivas y por la erradicación de todas las formas de violencia por razones de género.
Este año, a la protesta histórica de las mujeres organizadas, se suma el reclamo por el ajuste brutal del gobierno de Javier Milei dirigido también al "Hospital Garrahan, Conicet, migrantes, Ley de Emergencia en Discapacidad, jubilados, transfeminismos, universidades, trabajadores del arte, ambientalistas, inquilinxs, niñeces, trabajadores despedidos y comunidades indígenas", según detallaron.