Lo sacaron por la puerta de atrás… para darle más poder
En marzo pasado, Demian Reidel se ganó el repudio generalizado tras declarar en una exposición pública que “el principal problema del potencial argentino en inteligencia artificial es que está poblada por argentinos”. La frase fue tan brutal que incluso él mismo tuvo que salir a pedir disculpas públicas.
Ahora, cuatro meses después, el Gobierno de Javier Milei aceptó su renuncia como jefe del Consejo de Asesores. ¿El motivo? Ninguno. ¿Su reemplazo? Tampoco se nombró. Pero lo más insólito es que no se va del Gobierno, sino que pasa a manejar uno de los proyectos más estratégicos del país: el Plan Nuclear Argentino.
¿Renuncia o ascenso encubierto?
A través del decreto 481/2025, el Ejecutivo aceptó la renuncia sin explicaciones, firmada por el propio presidente Milei y su jefe de Gabinete, Guillermo Francos. Sin embargo, horas después, Reidel publicó en X (ex Twitter) que asumirá la presidencia de Nucleoeléctrica Argentina, desde donde liderará el ambicioso Plan Nuclear del oficialismo.
Según él mismo detalló, el plan incluye:
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La construcción del primer reactor modular argentino.
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La extensión de vida de las centrales existentes.
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El impulso a la minería de uranio.
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La creación de YPF Nuclear.
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Y el desarrollo de una política energética “orientada a recuperar la soberanía y potenciar el desarrollo científico-tecnológico del país”.
Todo, de la mano del funcionario que hace poco afirmaba que el verdadero obstáculo para el progreso nacional eran los propios argentinos.
De asesor en retirada a nuevo Zar nuclear
El cambio de funciones de Reidel generó ruido en todos los frentes. Para los defensores acérrimos del gobierno, es una muestra de confianza y continuidad técnica. Para los críticos –y no solo los opositores tradicionales–, se trata de una incoherencia grosera.
¿Cómo es posible que un funcionario que menospreció al pueblo argentino quede a cargo de la estrategia nuclear de un país entero?
Mientras tanto, el titular de YPF, Horacio Marín, blanqueó días atrás en el canal Neura que Reidel es pieza clave para que YPF ingrese a la minería de uranio y desarrolle reactores modulares que alimenten data centers para inteligencia artificial.
Un país dividido… otra vez
La decisión ya encendió las redes: mientras los libertarios festejan la “visión científica” del nuevo rol de Reidel, miles de usuarios recuerdan sus frases y lo acusan de cinismo, elitismo y desprecio al país.
La grieta no da tregua. Y con cada movimiento interno del Gobierno, la polémica crece dentro y fuera del círculo libertario. Algunos ven estrategia. Otros, provocación.
Lo cierto es que mientras Argentina define su futuro energético, una de las personas que más ruido generó con sus palabras será quien lo pilotee. Y así, otra vez, la gestión Milei vuelve a patear el avispero.