El petróleo sube y las empresas bajan

La industria de E&P ha entrado en un régimen diferente después de junio de 2014. La erosión que sufrió el sector de empresas de Servicios Petroleros fue extraordinaria. La Argentina y especialmente Neuquén, durante este tiempo, no observó la tendencia mundial y continúo con la ilusión de la tierra prometida.

En el siguiente gráfico, la referencia “XOP” responde a un fondo cotizado en bolsa (ETF) de compañías de Upstream y “OIH” a un fondo de compañías de servicios petroleros. Los indicadores hablan por si solos. Mientras la industria de servicios en estos últimos cinco años se desmoronaba, Argentina insistía con la implementación de medidas que atentaban contra el propio corazón de la industria petrolera.

Ambos fondos ( XOP y OIH) han tenido un rendimiento inferior al S&P 500 (el índice Standard & Poor´s 500 bursatil más importante de EE.UU). Las tendencias de los fondos de inversión comparado con el índice más representativo de la situación real del mercado explican la tendencia y recesión de la industria.

Los desafíos sostenidos que enfrentó el sector en los últimos 5 años ha obligado a las empresas de servicios ir más allá de las respuestas típicas de reducción de costos, reducción de personal o cambios en su estructura de costos. En realidad esto paso en el resto del mundo porque en la "isla neuquina" se continúo con demandas de mayores costos sin tomar real dimensión de lo que ocurría en el resto del planeta.

Según la información de especialistas internacionales, los inversores en empresas de servicios petroleros -llamados OFES- son claramente pesimistas sobre las perspectivas futuras de este sector. En la última reunión de inversionistas reclamaron cambios urgentes para dar respuesta a la actual recesión.

Los inversores consideran que las empresas de servicios deben modificar las estructuras organizativas y en el modelo operativo de gestión; algo muy lejano a la actual visión de los líderes políticos y sindicales locales. De concretarse las medidas corporativas de las empresas de servicios, será importante reflexionar sobre el mediano y largo plazo y las posibilidades de convertir a la Argentina en un país exportador de gas y petroleo. 

Hacia donde se dirigen

Las grandes empresas de servicios como Halliburton, Schlumberger y Baker Hughes iniciaron recientemente procesos de alianzas con empresas tecnológicas y cambios en sus estructuras organizativas.

Un ejemplo de ello son las asociaciones que realizó Microsoft con Halliburton y Schlumberger. Según el Vicepresidente corporativo, Tom Keane, la empresa de tecnología desarrolló un software que permite a los geocientificos explorar datos en realidad aumentada.

"Pueden entender los modelos de la Tierra, pueden identificar dónde existen reservas de petróleo y gas, y pueden profundizar señalando los datos y navegando con las manos", dijo Keane a un medio especializado. "Las personas de todo el mundo que usan un dispositivo móvil, un auricular, una aplicación basada en la web, una PC pueden colaborar sin copiar terabytes o incluso petabytes de datos".

Pero no solo las empresas de servicios petrolero iniciaron un proceso de cambio. La operadora Equinor está en un proceso de recopilación masiva de datos para mejorar su próxima generación de proyectos.

"El desafío no es qué datos compartir sino definir las reglas del juego sobre cómo compartir [los datos]", dijo Anders Opedal, vicepresidente ejecutivo de tecnología, proyectos y perforación de Equinor durante el Foro de Innovación de Halliburton Landmark (LIFE 2019) en Houston.

Para superar la inclinación de la industria hacia el proteccionismo de datos, Equinor se convirtió en miembro fundador de la iniciativa Open Subsurface Data Universe (OSDU), una plataforma de datos estándar entre las mayoría de los operadores y empresas de servicios más grandes del mundo.

En las próximas semanas, Microsoft llevará su relación con Equinor al siguiente nivel. Lanzará la plataforma en la nube Azure desde Noruega. En general, la plataforma tiene una presencia global que abarca 200 centros de datos, 54 regiones, 70,000 millas de fibra, múltiples sistemas de cable submarino y 138 sitios. Un dato para reflexionar.