El teléfono celular secuestrado al único imputado por el femicidio de Laura Cielo López, será peritado por expertos en informática del Ministerio Fiscal de la ciudad de Buenos Aires, ya que su contenido podría aportar valiosa información para la causa como, por ejemplo, con quién se contactó Alfredo Escobar tras el asesinato para, si es que así fue, pedir algún tipo de colaboración. Al aparato, un Motorola, se tiene acceso mediante la huella dactilar de su dueño. Por otra parte, se informó que personal de Seguridad Personal de la Policía trazó tres posibles itinerarios entre la casa de Estrada 60 de Plottier y la zona de espigones del Limay, en China Muerta, donde fueron encontrados los restos de la adolescente.
El Fiscal General José Gerez ofreció este miércoles una rueda de prensa para dar a conocer que el martes mantuvo una reunión con la familia de Cielo, su abogado querellante Marcelo Hertzriken Velasco y el perito de parte, Eduardo Prueger, a quienes impuso de los avances de la investigación.
Gerez confirmó lo anticipado por mejorinformado.com, en cuanto a que de la casa del imputado fueron secuestrados dos teléfonos celulares: un Samsung y un Motorola. Sobre éste último la fiscalía puso su atención ya que era el de uso diario de Escobar. Debido a que sólo puede ser activado con la huella dactilar del imputado, el aparato será enviado a un grupo de expertos en tecnología de la Fiscalía de la ciudad de Buenos Aires.
El fiscal indicó que “aun cuando haya borrado mensajes o contactos, con la aplicación de la tecnología que poseen podremos saber a quién llamo o a quién envió mensajes”. De esa manera, se abriría un panorama más claro de si Escobar pidió ayuda para el desmembramiento del cuerpo de la adolescente o para trasladarlo el sábado 14 a las once de la noche al río.
“Que la pericia a los tres vehículos que fueron secuestrados no hayan arrojado resultados positivos en cuanto a restos biológicos en su interior, no significa que no hayan sido usados para trasladar el cuerpo”, dijo Gerez.
Laura Cielo López fue asesinada en la madrugada del viernes 13 de septiembre en Plottier y sus restos fueron encontrados entre el domingo 15 y el lunes 16 en el río Limay en China Muerta. Las pericias criminalísticas determinaron la existencia de manchas de sangre –el ADN concluyó con que era de la joven- en la casa de Estrada 60. Entre ese domicilio y los espigones hay aproximadamente 12 kilómetros. Esa distancia tiene, al menos, tres trayectos posibles, según el trabajo pericial de la división Homicidios de la Policía. “La Policía nos hizo tres trayectos posibles hasta el río, y con ellos vamos a buscar en las cámaras de seguridad públicas o de privados los movimientos del imputado y qué vehículo usó para el traslado”, señaló Gerez.