Se robó una moto policial de la comisaría, pero lo atraparon

"La ocasión hace al ladrón", reza el viejo dicho popular. Esa es la única explicación como para que un delincuente se decida a llevarse una de las motos de la Policía del interior de la Comisaría, con alto riesgo de que lo descubran. 

El hecho ocurrió en la Comisaría 12 de El Bolsón, muy cerca del mediodía con un montón de gente en la calle que fue testigo de toda la acción. Según cuentan testigos, porque ninguna autoridad oficial quiso confirmarlo, el joven ingresó a la unidad policial para tramitar la devolución de su moto, que había sido secuestrada tiempo atrás, pero al no tener los papales en regla, nunca la pudo retirar.

Entre la cantidad de gente que había en la guardia, el joven aprovechó para agarrar una moto Corven 200 con leyendas de la Policía de Río Negro en el tanque de nafta, y salió del predio de la Comisaría empujándola. Como si pudiera pasar desapercibido. El éxito del robo duro apenas unos minutos, es que uno de los policías alcanzó a ver la maniobra e inmediatamente alertó a sus compañeros, que rápidamente llegaron al lugar.

En la esquina de la Comisaría, a pocos metros de la Municipalidad y del Banco, los lugares más transitados de la localidad, dos patrulleros le cerraron el paso al delincuente, quien sin poner resistencia, entregó la moto como si nada hubiese pasado. Obviamente que los uniformados procedieron a detenerlo y se labraron las actuaciones correspondientes para elevar la causa de robo al Ministerio Público. 

Fue convocado el gabinete de Criminalística para realizar las pericias correspondientes, mientras la gente pasaba por el sector sin entender demasiado lo que sucedía. Los curiosos se quedaban unos minutos y tejían múltiples historias, pero ninguno fue tan audaz como para imaginar que el delincuente, que permaneció todo el tiempo esposado, podría haber robado la moto desde el interior de la unidad policial.