Taxistas pidieron a Gerez apelar la decisión de una jueza

Una caravana protagonizada por decenas de taxis, que partió del hospital Castro Rendón –donde permanece internado Miguel Sisterna, baleado días atrás en Cuenca XV- culminó en el Edificio Judicial donde una representación de los taxistas fue recibida por el fiscal general José Gerez, a quien le entregaron una nota en la que le expresaron su malestar por la liberación de los tres presuntos autores del disparo.

Pasadas las diez de la mañana, los taxistas se concentraron en la manzana del hospital para acompañar a Sisterna y a su familia. El conductor, de 33 años, recibió un balazo del calibre 9 milímetros en el cráneo cuando quedó en medio de una balacera. Desde ese día se encuentra en coma farmacológico y con respiración asistida.

Tras una vuelta haciendo sonar sus bocinas, la caravana se dirigió a la Ciudad Judicial.

Allí fueron atendidos por Gerez, por el fiscal jefe de Homicidios, Juan Agustín García y la fiscal María Eugenia Titanti, a quienes les entregaron un petitorio de descontento por la decisión de la jueza de Garantías, Carina Ávarez, quien en la audiencia de acusación del pasado viernes decidió concederles prisión domiciliaria a Hugo Román Sura, de 18 años, Lucas Castillo, de 19 y Cristian Fuentes Sáez, de 25.

En la reunión estuvieron presentes dirigentes del Sindicato de Peones de Taxis e integrantes de la familia de Sisterna.

Gerez le comentó al titular del sindicato, Eduardo Liria, que al momento de realizar la acusación en contra de los imputados en el caso, desde el Ministerio Público Fiscal se había pedido la prisión preventiva de los tres acusados. Y que una Jueza de garantías "resolvió otorgarles la prisión domiciliaria".

“Queríamos manifestar nuestro rechazo a esta decisión que tomó la jueza de garantías”, planteó Lira. “Agradecemos que nos hayan recibido para escucharnos y queremos acompañar a la fiscalía para que esta medida se pueda revertir”, añadió.

En conversación con mejorinformado.com, Lira señaló que “queremos que se presente la apelación correspondiente porque esta gente es un peligro para la sociedad”. Y señaló no entender” por qué la jueza Álvarez, aun cuando consideró que los imputados mostraron un profundo “desprecio por la vida”, los envió a sus casas.

Sisterna sigue internado en la terapia intensiva del hospital Castro Rendón desde el 7 de agosto.

Ese día, alrededor de las 15.40 Sisterna fue alcanzado por uno de los 12 balazos que partieron de la camioneta Toyota Hilux color negro en la que transitaban los imputados, cuando circulaba por Casimiro Gómez casi Cabellera del Frío, en Cuenca XV. Los disparos tenían como objetivos a otros jóvenes que se movilizaban en un Citroën C3 por un incidente previo.

Sura, Castillo y Fuentes Sáez están acusados de “homicidio calificado por el concurso premeditado de dos o más personas agravado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa, en concurso real con lesiones gravísimas agravadas por el uso de arma de fuego, en calidad de coautores”.