La Justicia se olvidó de juzgar a una narco y quedó libre

El olvido o retraso de la Justicia en llevar a un narco al banquillo de los acusados y garantizarle un juicio justo con el debido respeto al derecho de defensa, le permitió salir indemne sin ningún tipo de antecedente ni inhibición. Es que el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de General Roca tras más de 8 años desde el día que lo encontraron transportando drogas y con un arma, resolvió la extinción de la acción penal por violación del plazo y disponer el sobreseimiento definitivo

En 2012, tras de un extensa investigación de la Policía de Río Negro y de un procedimiento exitoso del personal de Toxicomanía, lograron capturar a un hombre que en su camioneta transportaba varios ladrillos de marihuana. Más tarde, en el allanamiento en la vivienda que ocupaba en Las Grutas, también encontraron droga y un arma calibre 32 con todos los proyectiles y dinero en efectivo.

Luego de un año de cárcel, en 2014 se inició el proceso de elevación a juicio, pero nunca llegó a pisar el edificio de la Justicia Federal. Es que rápidamente el narco consiguió la excarcelación para esperar el debate en libertad, sin embargo nunca se hizo el juicio.

La Cámara Federal de Roca en su fallo sostiene que "no existe justificación alguna para el largo plazo transcurrido sin que se hiciera el juicio, sólo atribuible al órgano jurisdiccional", y especifica además que no se "justifica de manera alguna que la causa haya llegado a juicio ocho años después del hecho, pues tiene el derecho a que se resuelva su situación procesal en un tiempo oportuno, como así también a efectos de contribuir a una más efectiva administración de Justicia -la que debe procurar pronunciamientos justos y oportunos-, estimo que corresponde declarar la extinción de la acción penal por violación del plazo y disponer el sobreseimiento definitivo".

De todas maneras, se ordenó después de 8 años destruir la droga secuestrada como prueba. Y que le devuelvan celulares y cajas con preservativos, que fueron encontrados en su domicilio durante el allanamiento. Del mismo modo se dejó sin efecto y levantaron la inhibición general de bienes que se dispuso en su momento al ser procesado y las obligaciones de consulta que le impusieron para beneficiarlo con la excarcelación.