ABUSO SEXUAL INFANTIL
Condenan por abuso sexual al que secuestró a un defensor
Fue condenado a 10 años de prisión. Abusó de una niña de su entorno familiar durante casi 6 años en Zapala.
El hombre que en marzo pasado mantuvo secuestrado durante más de 11 horas al defensor público de Zapala, fue condenado a 10 años de prisión por haber abusado sexualmente de manera reiterada de una niña de su entorno familiar.
La audiencia de determinación de la pena se realizó en Zapala. En su alegato de clausura, el fiscal Marcelo Jofré había pedido al tribunal colegiado que se lo condene a 15 años de prisión.
La sentencia recayó en Andrés Villar quien entre los años 2013 y 2016 abusó sexualmente de una niña que era parte de su entorno familiar y con quien convivía en la misma vivienda en una localidad cercana a Zapala. Los abusos continuaron entre 2017 y 2019, cuando el grupo familiar se mudó a la ciudad de Zapala, también en un mismo ámbito de convivencia.
El delito que le atribuyó Jofré fue abuso sexual simple reiterado, agravado por haberse cometido contra una menor de dieciocho años aprovechando la situación de convivencia preexistente y ser encargado de su guarda, en concurso real con abuso sexual con acceso carnal reiterado agravado por haberse cometido contra un menor de dieciocho años aprovechando la situación de convivencia preexistente y ser encargado de su guarda, todo en calidad de autor.
La defensoría del Niño y el Adolescente adhirió a la acusación efectuada por la fiscalía.
En marzo, el tribunal del juicio había declarado la responsabilidad penal de Villar. La semana pasada se realizó la audiencia de determinación de pena en la que el fiscal del caso requirió la pena de 15 años de prisión efectiva. Y hoy el tribunal dio a conocer la decisión: 10 años de prisión de cumplimiento efectivo.
Al momento de requerir la pena, el fiscal planteó como agravante que en marzo pasado, Villar y una mujer ingresaron a la sede de la defensoría oficial de Zapala y allí retuvieron ilegítimamente al defensor público Pablo Méndez, durante once horas y diez minutos, con el objetivo de obligarlo a pedir una nueva Cámara Gesell en el caso de abuso sexual por el que fue declarado penalmente responsable. Para esto, Villar usó un machete, una navaja, un palo y una cadena, y ató al defensor público y lo intimidó.
Por este comportamiento fue imputado del delito de privación ilegítima de la libertad coactiva y se le impuso prisión preventiva.
