Un atleta murió durante un persecución policial en Mar del Plata. El deportista era conocido en la zona porque durante varios años vivió en Viedma, dónde estudiaba para ingresar a la Policía de Río Negro. El hombre de 33 años circulaba en una moto con pedido de secuestro y decidió huir de un control de la Bonaerense.
El hecho ocurrió el domingo a la madrugada en la transitada avenida Independencia de Mar del Plata luego de una intensa persecución a la que se fueron sumando móviles de la Policía provincial. Según reportó la Bonaerense, José Ignacio Sallago se dio a la fuga luego de que desde un patrullero le indicaran que se detenga.
El deportista vivió algunos años en Viedma, a donde llegó desde su Bahía Blanca natal. Según se supo, durante un tiempo además de participar en competencias de calle, como se denominan en el ambiente de las maratones, Sallago también se inscribió en la Escuela de Oficiales de la Policía de Río Negro.
Pero no llegó a recibirse y cambió abruptamente de planes. Seducido por la posibilidad de crecer en el mundo deportivo, viajó a Mar del Plata, donde se incorporó al equipo JM Corredores. También consiguió trabajo en una distribuidora de golosinas y vivía en un departamento con un compañero.
El domingo a las 2 de la madrugada, transitaba a bordo de una moto Bajaj Rouser 200cc y decidió escapar en un semáforo, cuando desde un patrullero le indicaron que se detenga.
Luego de varias cuadras de una persecución cinematográfica, a la que se fueron sumando móviles, chocó violentamente contra una camioneta de la Bonaerense que se cruzó de mano para lograr que se detenga. Fue en Independencia y Juan José Paso.
El golpe contra la puerta del acompañante de la camioneta fue tremendo. El atleta junto con la moto revotaron y cayeron a varios metros del lugar del impacto. Aunque una ambulancia del SAME llegó en pocos minutos, Sallago murió de manera inmediata.
Toda la secuencia de la persecución quedó grabada en las cámaras del sistema de monitoreo de la ciudad y rápidamente llegaron a los medios de comunicación. Sus compañeros de equipo aseguran que la moto la había comprado con sus ahorros y que el propio dueño de la distribuidora le había adelantado dinero.
Lo cierto es que la moto tenía pedido de secuestro desde febrero de este año cuando fue denunciada por robo. En el caso interviene el fiscal Rodolfo Moure, quien ordenó el secuestro de la moto y del patrullero. La causa está caratulada como “homicidio culposo”.
Entre los logros más importantes, Sallago había alcanzado el tercer puesto en los 42K del Maratón de Mar del Plata en 2022 y la misma ubicación en los 10K de la misma ciudad disputado hace unos meses.