La Policía de Río Negro cometió un nuevo papelón. Una moto que estaba bajo custodia judicial fue robada del patio de la Comisaría 9° de Catriel. El hecho fue captado por las cámaras de seguridad de la propia dependencia, pero ningún uniformado alcanzó a darse cuenta de lo que estaba sucediendo. En el video se puede ver como dos hombres empujaron el vehículo hasta la vereda, donde desaparecieron.
Aunque no trascendió inmediatamente, con el paso de los días se pudo conocer un fragmento del video de las cámaras de seguridad de la Comisaría 9°. El hecho sucedió el pasado miércoles 3.42. La moto tipo enduro de 200cc. robada formaba parte de un lote incautado por causas judiciales y estaba dentro del predio con mayor presencia policial de la ciudad, la propia comisaría.
En el video se puede ver como dos hombres salen empujando la moto por el acceso de los patrulleros. No se escondieron y sólo tomaron como recaudo usar las capuchas de sus camperas. Se puede ver como a medida que avanzan hacia el portón de rejas que da a la calle Añatuya, apuraron el paso por el miedo a ser descubiertos con el botín en su poder.
En la captura quedó claro que una vez que dejan atrás el portón de rejas de la Comisaría 9°, que permanece abierto las 24 horas, giraron en dirección a Honduras y desaparecieron del plano de grabación de la cámara de seguridad con la que se vigila el patio donde quedan resguardados diferentes elementos secuestrados por la Jsuticia y que quedan a cargo de la Policía como depositario judicial.
El expediente fue caratulado como "presunto estelionato" se tramita bajo el número MPF-CI-01934-2025 en la Fiscalía N° 7 de Cipolletti, a cargo de la fiscal Alejandra Altamira. No hubo todavía información oficial sobre actuaciones administrativas ni sanciones internas. Los investigadores trabajan para establecer si existió algún tipo de filtración con respecto al lugar exacto donde estaba la moto resguardada, por cómo actuaron los delincuentes con información precisa.
También alguna posible complicidad para liberar la zona, ante la tranquilidad con la que pudieron ingresar al patio de la Comisaría 9°, y sacar la moto con la seguridad de que nadie intervendría para impedir el robo y hasta detener a los delincuentes.