Preocupa la deserción escolar en los jóvenes

El Cemoe es un instituto que se dedica a la enseñanza profesional de los jóvenes y pertenece a la congregación salesiana. Por el momento, cuenta con 33 adolescentes que habían abandonado sus estudios por adicciones u otro tipo de situaciones. Uno de los maestros de este lugar, Jorge Peressoni, contó que tiene chicos de la población rural y precisó que pretende fortalecer los talleres de expresión cultural para meterse de lleno en los nuevos procesos de enseñanza y a las nuevas tecnologías.

"Ante la preocupación por la deserción social, hemos elaborado un proyecto educativo alternativo para la reinserción de los chicos al ámbito educativo. Allí le enseñamos albañilería, electricidad y otros oficios. Pretendemos trabajar con chicos que tienen vulnerabilidad social porque la mayoría ha intentado hacer el secundario en otros establecimientos escolares y por distintas circunstancias se les hace difícil continuar con un proyecto así", comentó en AM550.

Peressoni deslizó que hay una alta deserción escolar, aunque el Cemoe fue creciendo año a año, por ejemplo: en el 2015 había dos chicos, en el 2016 eran 11 y ahora son 33 (en realidad eran 39, pero 6 chicos volvieron a la calle). Para el año venidero, hay una proyección grande en la escuela.

Consultado sobre cual es la clave para que los chicos tengan constancia en sus estudios, Peressoni tiró que es fundamental trabajar en la motivación para que los jóvenes vuelvan a confiar en ellos y así prosigan con su preparación.