Los crianceros que bajan al pueblo en el Día de la Patria

La Patria, dicen, se hace trabajando. La Patria, sostienen, demanda siempre el esfuerzo. Algo de eso sabrán las dos familias de crianceros que este 9 de Julio, Día de la Patria, bajaron desde las alturas de la Cordillera del Viento hacia Tricao Malal, con sus piños de chivos, después de haber pasado todo el temporal de nieve viviendo en una piedra tapada con piedras.

Las cinco personas, crianceros todos de oficio y convicción, habían sido asistidas, hace unos días, como informó este medio, en un operativo especial, con helicóptero, en un paraje denominado La Aleta.

Los rescatados se dedican a la crianza de animales, y estaban totalmente aislados por el fuerte temporal de nieve. Los buscaron durante 12 días, porque se había perdido su rastro. Finalmente, en La Aleta, poco antes de la Pampa Ferraina, se pudo llegar para asistirlos, con alimentos, frazadas y ropas de abrigo.

Ahora, en el Día de la Patria, emprendieron el regreso. Con la nieve hasta la cintura. Siguiendo un camino que solo ellos pueden ver en el infinito manto blanco de la nieve. Con sus chivos como si fueran arietes, arados sin siembra, abriendo el canal por donde se puede andar sin peligro de caer a los abismos.

El operativo especial de localización y asistencia de la vez pasada había sido coordinado a través de la Dirección Provincial de Aeronáutica, la secretaría General y Servicios Públicos, la secretaría de Desarrollo Territorial y Ambiente, y la secretaría del Interior y Gobiernos Locales, junto al municipio de Tricao Malal.

Este otro operativo, fue monitoreado a la distancia, y les pertenece por entero a estos crianceros, símbolos de una Neuquén que todavía vive, y que une a los siglos en el mismo hilo, el del trabajo, el del coraje, el de la prepotencia humana frente a la naturaleza.