Comerciantes no están de acuerdo con el “toque de queda”

Este miércoles el presidente Alberto Fernández propuso a los gobernadores un “toque de queda sanitario” a partir de las 23 y hasta las 6 de la mañana. La prohibición de circulación durante la madrugada con el fin de disminuir los casos de coronavirus en el país molestó a comerciantes, hoteleros y sector gastronómico que, en líneas generales, coinciden en que las consecuencias de estas restricciones serían “un desastre” refiriéndose claro al impacto económico. 

Aún no hay definiciones sobre la aplicación de la medida sanitaria en Río Negro y Neuquén, pero sí trascendió que la gobernadora rionegrina Arabela Carreras estuvo de acuerdo en las restricciones pese a que, en las próximas horas, dialogará con algunos intendentes y con parte de su gabinete antes de definirlo, aunque no descartan una reunión virtual con los jefes comunales para que sea acordado por todos. 

En tanto, en Neuquén, la restricción horaria podría ser a partir de la medianoche y hasta las 6 de la mañana según pudo confirmar esta multimedia. Sin embargo, el pedido de Fernández en la reunión de la que formó parte el gobernador Omar Gutiérrez fue un “toque de queda sanitario” desde las 23. 

El repudio a las medidas para frenar el rebrote no tardó en llegar y desde la Multisectorial de Comerciantes Autoconvocados de Neuquén publicaron un comunicado donde expresaron el rechazo por “ineficaces, lesivas e ineficientes todas las políticas de cierre de comercios”. 

Georgina Ñanco, referente de la Multisectorial reconoció a este medio que las medidas no las van a acatar. Asimismo, Marina Larrat, propietaria de una pizzería en el oeste neuquino aseguró que “el fuerte de los gastronómicos es la noche” y que durante la cuarentena se reinventaron y venden fiambre durante el mediodía, pero las ventas no son las esperadas. 

Larrat reconoció que en caso de “obligarnos a cerrar a las 23” no lo harán porque “es lo único que le da de comer a la familia y tenemos muchas deudas”. 

Para la cordillera también las medidas serían devastadoras considerando que el turismo de verano dio un respiro al parate del 2020. Agustín Roca representante de la cámara de hoteleros y gastronómicos de San Martín de los Andes agregó que “la medida es un acompañamiento a fundirnos”. Además, reconoció que para el sector "sería bueno" mantener la restricción hasta la 1 de la mañana (vigente hasta el momento) y apuntó a "mejorar los controles donde sea necesario para que no nos perjudiquen". 

Roca: "Nosotros estamos muy atentos a mantener los protocolos porque debemos y sabemos que al cliente hay que cuidarlo. El problema está en los espacios públicos y en los eventos privados sin controles ni protocolos".

Por su parte, Gustavo Ammann, presidente de la Cámara de Hoteleros y Gastronómicos de Neuquén reconoció que "sería difícil de soportar. Debemos evitar el cierre de actividades e insistir con la responsabilidad personal y el sentido de compromiso social que debemos tener".

Mientras que, en Cipolletti, comerciantes expresaron su preocupación frente a medidas más estrictas, como la vuelta a una fase de aislamiento total – descartado por lo pronto por el gobierno nacional. “Los comerciantes y pequeños empresarios cipoleños no aceptarán y se opondrán terminantemente a cualquier medida restrictiva de su actividad” expresaron.

En diálogo con José Luis Bunter, presidente de la Cámara de Comercio de Cipolletti expresó: “Nos oponemos al retroceso. Entendemos que los comercios no son el foco de contagios y en este caso las reuniones sociales en casas particulares, manifestaciones de grupos organizados o cortes de puentes, reuniones en la plaza, costa o en el rio son los puntos que el estado debería controlar y no los comercios que cumplen con todos los protocolos al pie de la letra”.  

Por su parte, el intendente Claudio Di Tella, reconoció que en ningún momento se planteó un cierre o alguna nueva medida frente al aumento de casos.