Investigan la extraña mutilación de una cabra en un campo

Hablar de los “fenómenos OVNI” (ahora llamados Fenómenos Aéreos No Identificados) y de la aparición de animales extrañamente mutilados no es nuevo. Año tras año en el mundo cobran relevancia los avistajes de extrañas luces y asociado a ello  el hallazgo de animales de campo sin órganos, con cortes quirúrgicos perfectos y sin una gota de sangre derramada.

En nuestro país, en la década del 80, tuvo lugar una investigación en el centro de la provincia de Buenos Aires a partir de la detección de una extraña gripe a la que se bautizó “la gripe Azul” (cuyo origen se le atribuyó a esa localidad), a partir de la que fue recurrente la aparición de animales mutilados. Después se teorizó sobre ello y los investigadores dijeron que en realidad las mutilaciones “intentaron sofocar un brote especialmente virulento de esa gripe, y para enmascarar el accionar de quienes estaban detrás”. En definitiva se las atribuyeron a la mano del hombre.

Pero habar del cadáver de una cabra, que apareció en un campo vecino, que debió atravesar cinco alambrados y un boyero, y que presentaba marcas de cirugía “exquisitas”, parecería contradecir la conclusión de aquellos científicos.

Este miércoles, en el programa Cambio de Aire, por AM550, Andrea Pérez Simondini, una apasionada investigadora del fenómeno OVNI, habló en extenso sobre avistamientos de extrañas luces en campos de Santa Fe, Entre Ríos y La Pampa, y de las mutilaciones de animales que se observaron con posterioridad.

“Estamos investigando una mini oleada de avistajes en el Litoral, que ahora podemos ir a investigar, asociados a fenómenos de alta extrañeza como la mutilación de ganado vinculada a esas luces”, señalo la investigadora.

Destacó que “lo de las mutilaciones es cíclico; las denuncias comienzan a principios de junio y se extienden hasta fines de octubre”.

Actualmente “tenemos muchos casos en Entre Ríos, también en Santa Fe, Corrientes y en La Pampa dos casos” indicó.

Pero relató que el más impactante ocurrió en un campo en Entre Ríos. “El último fue el de una cabra que apareció en el departamento Diamante; estaba en su corral y apareció en un campo vecino, sorteando cinco alambrados (uno con boyero) y apareció mutilada, y por lo que creemos se trató de un evento aéreo. De un nivel de extrañeza importante”.

Y dio detalles de lo que los investigadores observaron: “tenía la cara con un corte en forma de herradura, con la extracción de huesos hioides y un marca muy visible en el abdomen. En la necropsia encontramos un moretón muy grande como de sujeción. Y en las mamas, una glándula mamaria estaba entera, pero la otra presentaba una muy prolija extracción de la cobertura del pezón, con una técnica exquisita. Fue muy impresionante”, afirmó.

Aclaró que el episodio aun no pudo ser acarado. “Estuvimos en el lugar con la Policía Rural y veterinarios. Esa precisión quirúrgica es muy difícil de obtener en un quirófano”, agregó.

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