Se resbaló en el transporte escolar y deberán indemnizarla

La Justicia falló a favor de la familia de una niña de 9 años que se fracturó una de sus rodillas al bajar del transporte escolar que la llevaba de vuelta a su casa en la zona rural. El fallo del fuero civil determinó la responsabilidad del dueño del vehículo, de la provincia por contratar el servicio y de la aseguradora, que deberán pagar casi 4 millones de pesos.

En la demanda, los damnificados aseguraron que el piso de goma del vehículo que funcionaba como transporte escolar estaba recién lavado y mojado. Le atribuyeron a esas circunstancias el hecho de que la niña se haya resbalado en el último escalón y le haya provocado la caída que le ocasionó una fractura grave en su rodilla izquierda.

Con mucho dolor y tras quedar tendida en el piso, el tío de la pequeña salió a la tranquera de la chacra y fue quien la ayudó a entrar a la propiedad. La familia pensó que era un golpe de poca importancia pero luego de dos días advirtieron que no podía caminar y la llevaron al hospital donde se le diagnóstico la fractura de la rodilla izquierda.

Además, la niña presentó un cuadro de epifisiolisis de fémur distal grado III, que es la falta de irrigación en esa parte del hueso. Debió someterse a distintos tratamientos, estuvo con yeso y dejó de asistir a la escuela. Por su corta edad no podrá ser intervenida quirúrgicamente, al menos hasta los 16 años. La pericia que se hizo en la causa civil determinó una incapacidad del 35%.

El fallo de primera instancia, que aún puede ser apelado por las partes, concluyó que la responsabilidad era del propietario del transporte escolar y también del Ministerio de Educación ya que provee el servicio y detenta la guarda y vigilancia jurídica de niños y niñas hasta que son devueltos a su hogar.

En cuanto al dueño del transporte se encuadró en la responsabilidad del principal por la conducta negligente. En el caso se probó que el chofer debió obrar con previsión y extremar los recaudos para evitar el peligro durante la maniobra de descenso y garantizar la seguridad de la niña.

La familia consignó que la nena sigue experimentando dolores y sufrimientos agudos, a lo que debe adicionarse las secuelas propias del accidente, las que se traducen en renguera y la imposibilidad de practicar deportes.

La demanda prosperó por el total de 3.963.668,47 de pesos. La cifra incluye el daño físico, los gastos de farmacia, de tratamiento psicológico y el daño moral. Además del propietario de la camioneta y de la provincia, también deberá afrontar el pago de la indemnización una compañía aseguradora.

El fallo se conoció justo un día después de que un colectivo contratado por la provincia como transporte escolar sufriera un vuelco y cayera al canal Principal de Riego en Fernández Oro. En este hecho, una joven de 13 años resultó herida en su pierna por el golpe.