La falta de agua es un problema que siempre mantiene preocupados a los vecinos de Centenario. Debido a esto, la Municipalidad siempre tuvo el la intención de desarrollar un proyecto que consiste en cobrar el servicio a los grandes consumidores. Este nunca pudo concretarse, ya que tiene un costo político alto que es difícil de afrontar por cualquier intendente.
El proyecto tendría un trabajo en conjunto y con la reglamentación del Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS), y solo alcanzaría a los grandes consumidores como: galpones de empaque, empresas y embotelladoras de agua envasada, las cuales utilizan millones de litros para las ventas.
Las últimas pagan un servicio que tiene un valor de 72 mil pesos por mes. Este monto, que podría considerarse casi irrisorio, se revela como una suma insignificante para aquellas empresas dedicadas a la comercialización de agua. Es un tema delicado, ya que profundiza en cuestiones políticas sensibles y relaciones familiares arraigadas en una ciudad con una historia pionera con las grandes empresas.
La problemática quedó expuesta luego de que el intendente de Centenario, Esteban Cimolai, con una ecuación clara de usuarios conectados a la red y obras que no alcanzan a satisfacer la demanda, en especial durante el verano.
Son 15 mil los habitantes de Centenario que tienen problemas con el agua
La población que tenía proyectada Centenario era de 65 mil habitantes para el 2025, pero hoy supera los 80 mil. Esto se debió a la atracción que generó en el último tiempo el trabajo en Vaca Muerta. Es decir que hay 15 mil habitantes a los que no les llega el agua en distintas zonas de la localidad, como el sector sur de grandes desarrollos de loteos. Además de la meseta donde la altura no permite llegar con toda la presión.