A medida que el invierno va cesando y se aproxima la llegada de la primavera, aumentan los clientes en los gimnasios neuquinos, donde las motivaciones son diferentes, pero las ganas de verse bien son una constante en todos los casos.
Hay personas que mantienen la rutina de gimnasio durante todo el año o casi todo, pero hay otras que se suman a la actividad física una vez que concluyeron los fríos extremos y comienzan a pensar en mostrar sus cuerpos en verano.
Las motivaciones para concurrir al gym son muchas. Algunos lo adoptan como un complemento de salud para sentirse mejor, otros para verse musculosos mostrando el impacto hacia afuera, otros como filosofía de vida y hasta quien por aburrimiento recurre a los fierros para ocupar su tiempo.
En una rápida recorrida por los principales gimnasios de la ciudad se puede observar una variedad de precios en las cuotas, que van desde 20 mil por dos veces por semana, a 30 mil una rutina diaria hablando de precios económicos.
También hay otras propuestas que la cuota parte de los 35 mil a 40 mil, a lo que se puede sumar actividades complementarias, como spinning, aeróbic, aerobox, cama elástica u otras disciplinas complementarias que se suman a la actividad.
Las rutinas de gimnasia pueden durar desde 45 minutos a 2 horas, dependiendo del grado de entrenamiento y la intensidad con la que se desarrolle la actividad.
A la actividad física hay que acompañarla con una buena alimentación y cambios en los hábitos de consumo de comidas, que muchas veces juegan en contra de la constancia, pero que si se aplican pueden ser de incentivo a ver más rápidos los cambios corporales.