Este jueves comenzó la demolición del galpón abandonado, ubicado en la calle Tierra del Fuego al 900, en pleno corazón del barrio Belgrano de la ciudad de Neuquén, que se incendió el 25 de marzo del año pasado.
Luego de múltiples reclamos y situaciones de riesgo, se iniciaron los trabajos de demolición del inmueble, colindante con la Escuela 207, que representaba un peligro constante para la comunidad educativa y que había sido escenario de varios incendios en los últimos años. Como consecuencia del siniestro y el peligro de derrumbe, se tuvo que reubicar a la escuela en el Centro Nayahue, en Boerr 1200.
La autorización para ingresar al predio fue otorgada hace unos días por el Juzgado en lo Civil y Comercial N°4 de Bahía Blanca, luego de un prolongado proceso judicial que impedía la intervención estatal. Con la posesión legal del lugar, el Ministerio de Educación de Neuquén pudo avanzar con las tareas de limpieza y demolición para garantizar condiciones seguras en el entorno escolar.
El galpón abandonado sufrió varios incendios y fue el lugar de pernocte para varias personas que se encontraban en situación de calle. Durante mucho tiempo los vecinos del barrio manifestaron su preocupación por la situación del edificio y habían realizado denuncias por "el descontrol" que se originaba por las noches cuando las personas en situación de calle permanecían en el lugar. El galpón tiene sectores que están a punto de colapsar y se ha transformado en un foco de conflicto de peligro para toda la comunidad.
Aunque el galpón pertenece a un privado actualmente en proceso de quiebra, la situación judicial se mantendrá abierta. El terreno, en algún momento, podría ser subastado. El banco Galicia, propietario registrado, y la firma quebrada Lucaioli tenían responsabilidades legales en relación al inmueble.
Antes de iniciar la demolición, se llevaron a cabo tareas de desratización y desinfección exigidas por el Municipio, dado que el predio estaba deshabitado y acumulaba basura, roedores y restos de materiales peligrosos.
Los trabajos están previstos para durar entre 20 y 25 días, lo que permitiría que la Escuela Nº 207 retome sus clases presenciales en julio, tras el receso invernal. El objetivo es que los alumnos de la Escuela 207 puedan regresar cuanto antes al establecimiento educativo y recuperar la normalidad en un edificio seguro y en condiciones.
En declaraciones a Mejor Informado, Luciano Saborido, director de Mantenimiento Escolar de la provincia, sostuvo que "queríamos encontrar la solución para que los chicos no pierdan más días de clases. Había cuestiones que no se podían resolver porque nadie tomaba una determinación desde el juzgado federal. Se había hecho muy complejo todo”.
“Hay un trabajo previo hecho por un ingeniero que nos indica cuál es la hoja de ruta para poner en valor este inmueble. Se van a usar grúas y será un trabajo minucioso y meticuloso. De no mediar sorpresas, no habría problemas”, sostuvo el funcionario.