Una obra de conexión de gas largamente esperada por los vecinos del sector este de Neuquén está generando preocupación por su impacto vial. En avenida Casimiro Gómez, a la altura de calle Spoliansky, el mal tapado de una zanja dejó la cinta asfáltica en condiciones peligrosas para el tránsito, sin señalización adecuada ni iluminación suficiente.
La intervención forma parte de una obra importante: se trata del cruce de un caño de gas que conecta el sector este con el oeste, como parte del tendido general de la red, lo que permitirá que muchos hogares de la zona puedan acceder por primera vez al servicio.
Sin embargo, la empresa concesionaria que llevó adelante las tareas no realizó el tapado con pavimento ni con material estabilizado, sino que simplemente cubrió el corte con tierra. El resultado: un hundimiento notorio en plena calzada que ya provocó maniobras de alto riesgo entre conductores que transitan a alta velocidad, especialmente durante la noche.
"Vimos maniobras muy osadas. La gente circula a más de 60, 70 km/h, y ante la oscuridad y el pozo, muchos se ven obligados a frenar bruscamente o esquivar como pueden", explicó Denis Godoy, movilero de Prima Multimedios.
Uno de los momentos más críticos ocurrió cuando un Fiat Idea que circulaba en sentido sur-norte hacia la Circunvalación debió subirse literalmente al boulevard con cordón cuneta para evitar una colisión. Según testigos, el auto "voló prácticamente" y milagrosamente pudo retomar la calle sin consecuencias mayores.
Los vecinos reconocen el valor de la obra de gas, reclamada desde hace años, pero apuntan contra la falta de responsabilidad de la empresa que no garantizó condiciones seguras de tránsito tras la excavación. La ausencia de carteles, iluminación y señalización vertical agrava aún más el riesgo.
Mientras la obra de conexión avanza en paralelo a Casimiro Gómez, la preocupación crece por el estado de este cruce clave para el tránsito entre los barrios del este y el acceso a la Circunvalación.
Desde el sector piden que se actúe con urgencia para reparar el pavimento y señalizar adecuadamente la zona, antes de que ocurra una tragedia. Por ahora, la obra avanza… pero el peligro también.