Una adolescente zapalina denunció a un hombre de su entorno familiar por haber abusado sexualmente de ella durante años de su infancia. Finalmente fue acusado y condenado a 8 años y 8 meses de prisión efectiva.
Los hechos ocurrieron entre 2011 y 2013, cuando el hombre fue a visitar a la familiar en entornos de vacaciones. Según los testimonios de la joven, el acusado aprovechó de los momentos de soledad para profanar a la niña que, durante años, mantuvo en el recuerdo aquellos hechos.
Fue recién diez años después, ya siendo mayor de edad, que la mujer se presentó ante la fiscalía para denunciar al hombre. Allí se formularon los cargos que terminaron significando 8 años y 8 meses de prisión efectiva.
Para poder considerar la acusación desde la Justicia le dieron lugar a los testimonios de la joven que tomaron acción probatoria. Para ello tuvieron en cuenta la consistencia del relato durante todas las declaraciones necesarias.